El juzgado de Barcelona todavía podría prohibir a Endesa el reparto de dividendo extraordinario
Gran sorpresa. La eléctrica Endesa ha comunicado a la CNMV que ha vendido el 5% del capital de AUNA (todo lo que le quedaba) al banco alemán Deutsche Bank, por 378,9 millones de euros. De esta forma, Endesa firma que las plusvalías obtenidas pero su participación en AUNA, tras la venta de este operador a France Telecom, se elevan a.469 millones de euros, como afirma el propio comunicado de Endesa: El proceso completo de venta de la totalidad de la participación de Endesa en AUNA ha resultado en unas plusvalías totales de 1.469 millones de euros antes de impuestos y de 1.285,8 millones de euros después de impuestos, una vez descontados los gastos derivados de la venta y actualizadas las provisiones por posibles ajustes de precio.
Plusvalías que Endesa ha prometido repartir entre sus accionistas en forma de dividendo extraordinario, lo que ha provocado que Gas Natural le lleve a los juzgados, para ser exactos al Juzgado Mercantil número 1 de Barcelona. La prensa informa hoy de que la juez no ha paralizado el dividendo de Endesa, pero esto no es exactamente así. Gas Natural exigía medias cautelares, es decir, que Endesa no pudiera llevar a su próxima Junta General de Accionistas el reparto del dividendo extraordinario. Es cierto que la juez no ha cerrado de entrada el caso, pero también lo es que el próximo 30 de enero decidirá si adopta o no las medidas cautelares solicitadas por Gas Natural. Esta es la clave. En ambientes jurídicos se reconoce que es muy improbable que un juez contradiga una medida aprobada en Junta General de Accionistas (y los accionistas de Endesa estarán deseosos de cobrar un dividendo extraordinario) pero sí puede hacerlo antes. Y Endesa, por mucho que adelante la Junta, no tiene tiempo para celebrarla antes del precitado 30 de enero.
