Las preguntas sobre el Caso Faisán sacaban de quicio al anterior portavoz del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. La actualidad manda, pero este viernes no era Rubalcaba, sino Blanco, el encargado de responder después de que el juez imputara el jueves a un miembro del PSOE y dos mandos de la policía.
Blanco se agarraba al respeto a las decisiones judiciales y recordaba que minutos antes lo había hecho con una pregunta sobre el caso de los trajes.
No obstante, Blanco matizó que el proceso sobre el Faisán aún no ha terminado y "no se puede prejuzgar". Además, el portavoz señaló que el debate en torno al asunto tenía "mucho que ver con la gestión del Ministerio del Interior" en la lucha contra el terrorismo, pero también en la reducción de la criminalidad y, agárrense, con la reducción de la siniestralidad en las carreteras. Por si no le han visto la lógica, el PP, verde de envidia porque hay menos muertos los fines de semana, se inventa un chivatazo de la policía para evitar la detención de miembros de ETA. Clarísimo.
Mariano Tomás
mariano@hispanidad.com
