La avalancha migratoria sobre las costas españolas ha obligado a desplegar efectivos militares en colaboración con las fuerzas de seguridad del Estado. Tres aviones de vigilancia marítima y otros dos patrulleros se incorporarán a las labores control migratorio a lo largo de la semana.
La noticia se produce al mismo tiempo que la administración Bush toma la decisión de redoblar la vigilancia fronteriza con México a través del Ejército. La medida ha sido seriamente criticada por la sociedad progre, especialmente en Europa y España, donde parece existir una doble vara de medir.
Por otra parte, la Agencia Europea de Fronteras recomienda a los países de la UE que redoblen sus esfuerzos para identificar al mayor número de inmigrantes ilegales, para lo que pide un uso más eficaz de los servicios de Inteligencia e Información. A lo mejor lo que falta tanto en Estados Unidos como en España, es precisamente eso, inteligencia...