Aránzazu Mur, directora económica de ANFAC, presentó este jueves en el curso de verano de la APIE la situación del sector automovilístico en España. Tanto la matriculación como la producción han regresado a niveles de 2007. Desde ese año, se han dejado de producir 900.000 vehículos, el equivalente a 32 horas de trabajo.
Los ajustes de producción han llevado a que 14 de las 18 plantas de fabricación de automóviles existentes en España estén realizando un expediente de regulación de empleo. Los EREs afectan directamente a 34.030 trabajadores, el 53,4% del total en plantas de automóviles. Hablamos de empleos directos, pero, según cálculos de ANFAC, un empleo en fabricantes afecta a cuatro empleos en proveedores. Entre directos e indirectos, el sector da trabajo al 9% de la población activa.
Las ayudas directas del Plan 2000E, han logrado frenar la caída hasta registrar a 15 de junio de 2009 un descenso del 10,5%. Sin embargo, Aránzazu Mur recuerda que en comparación con la primera quincena de junio de 2007, la caída es aún del 44,8%. Los turismos han logrado incluso un aumento en sus ventas del 7% en los quince primeros días del mes. Al final de este año las ayudas estatales al sector habrán conseguido que de las 800.000 unidades previstas se pase a matricular cerca de 900.000. De esta manera, las ventas de 2009 serían un 23% inferiores a las de 2008 y no un 30% como se preveía antes de la aprobación de las ayudas directas. El Gobierno había previsto que estas ayudas lograran incrementar las ventas en 200.000 unidades, el doble de lo calculado por la patronal del automóvil.
Por el momento, Mur cree que es difícil llegar a producir los tres millones de vehículos que España se han fabricado cada año en la presente década.
Preguntada por la situación de Figueruelas, Mur señaló que los trabajadores de la planta aragonesa son eficientes y muy productivos. A pesar de la crisis, Mur considera que las fábricas españolas continúan bien posicionadas con respecto a Europa.
