El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, se mostraba entusiasmado sobre el proceso de regularización emprendido por el Gobierno. Ha informado de que llevan ya 434.000 peticiones y que, por tanto, fácilmente superaremos los 500.000. Es el mayor proceso más amplio de la historia desde 1945, señala con modestia.
Tras el autobombo, el peloteo. Caldera agradece a los funcionarios municipales la labor realizada y niega a Hispanidad que exista malestar en los municipios. Al contrario, el ambiente es de un entusiasmo digno de agradecer. Vale. Al menos, Caldera reconoce que en cuatro o cinco u ocho o diez ayuntamientos ha habido algunos problemas por los altos índices de concentración de población inmigrante. Vamos que España va mejor y que nuestra tierra ha comenzado ya a manar leche y miel.