Tras las últimas censuras de varias tecnológicas estadounidenses (Google, Facebook y Twitter), China, que en esta materia tiene experiencia, no ha querido quedarse atrás. Y es que ha decidido bloquear Clubhouse por conversaciones críticas con Pekín.

Se trata de una aplicación de red social de chat de audio lanzada en abril de 2020 por Paul Davison y Rohan Seth, compañeros de Silicon Valley, bajo el paraguas de su empresa de desarrollo de software Alpha Exploration Co. Para utilizar esta aplicación, la persona debe ser invitada por alguién, y entre los usuarios hay algunos famosos como Elon Musk, CEO de Tesla.

Ahora el gigante asiático ha impedido el acceso a Clubhouse por los debates que había surgido sobre temas que le resultan incómodos, como Hong Kong, Taiwán o la persecución de los musulmanes uigures. Una censura que ha confirmado la organización Great Fire, que hace un seguimiento de los bloqueos por parte de las autoridades chinas.

Recuerden que Google y Facebook, que aplican el lenguaje de lo políticamente correcto y se alían con verificadores (como Maldita.es, que junto a Fad y Google quiere romper la cadena de odio), están censurando a Hispanidad, fundamentalmente, por su ideario cristiano. Claro que tampoco se puede olvidar que roban publicidad a los medios de comunicación y que Google les copia las noticias. De hecho, en relación a esto último, el Gobierno australiano afronta una amenaza con cortar su índice de búsquedas si le obliga a pargar dinero por las noticias que reproduce. Además, Twitter no se queda atrás, porque recientemente bloqueó durante una semana la cuenta de Vox... pero ojo, al otro lado del Atlántico, las redes sociales no lo tendrán tan fácil: Florida las multará si silencian a candidatos políticos.