• Cincuentones que encargan hijos alquilados.
  • Ni se han comprometido con una mujer y ya no encuentran mujeres que se comprometan con la maternidad.
  • Y desde luego, a los cincuenta no van a criar niños.
  • Utilizarán una criada… de alquiler, para cuidar de sus hijos.
Leo que un popular actor va a ser padre con vientre de alquiler, a los 50 años de edad. Para entendernos, el susodicho se ha pasado la vida chingando sin compromiso. Píldora al canto, píldoras que son todas abortivas, al menos todas las que se venden hoy en la farmacia, aunque nadie se atreva a decirlo. Así, sus susodichas no pierden la figura ni él tiene que preocuparse de cambiar pañales. Estaba muy ocupado con su actividad artística. Pero ahora, miren por dónde, a los 50, quiere saborear la "experiencia" de  ser padre. Ha oído a algún amigo, de los que aún le quedan con sentido común, y ha decidido probar. Pero claro, a los 50 es más difícil, en primer lugar engendrar y, además, estará rodeado de mujeres que estarán comprometidas con la vida como él. Así que decide alquilar un vientre, a un ser humano, en USA, que está de moda, para tener un rollo. Rorro del que, con estos precedentes, el papá adoptivo no se ocupará ni un minuto porque para eso hay criadas hispanas o rumanas que limpiarán las heces del niño. Es evidente que no debe hacerlo un actor de moda, quien no puede entrar en un estudio de grabación, templo de la cultura, oliendo a vómito infantil. Para entendernos: un hijo no es un derecho, es un don de Dios y un deber del hombre. Estos tipos ni se merecen ese don ni se merecen tan digna obligación. Lo que merecen es otra cosa que no pienso decir porque hemos sido educados en colegio de pago. Eulogio López eulogio@hispanidad.com