Los políticos y los partidos tratan cada día de influir más en las empresas españolas, especialmente en las públicas y semipúblicas, pero también en las privadas. La penúltima muestra se puede ver en el hecho de que Cataluña (ahora gobernada por el PSC con Salvador Illa como ‘president’) podría entrar en Ineco, la empresa pública estatal de ingeniería y consultoría que depende del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible que dirige Óscar Puente, según informa Expansión.

Una ingeniería pública que en las últimas semanas ha cobrado bastante protagonismo al revelarse que tenía entre los miembros de su plantilla a Jessica Rodríguez, la que fuera pareja de José Luis Ábalos. Precisamente, el Senado ha aprobado el calendario de comparecencias en la comisión de investigación sobre el caso Koldo, entre ellas, la de Jessica Rodríguez, como pedía el PP, para el próximo 14 de abril, según avanza Vozpópuli. Asimismo, a petición del PP, deberán comparecer los ministros Luis Planas y Óscar Puente sobre las contrataciones de algunas mujeres (incluida la propia Jessica) en Tragsatec e Ineco, empresas dependientes de sus respectivos Ministerios. También están citadas otras mujeres relacionadas con Ábalos (Claudia Montes, Nicole Neasccu y Andrea de la Torre) contratadas en empresas públicas, así como los directores de Tragsatec (Juan Pablo González Montes), Tragsa (JesúsCasas) y la expresidenta de Ineco (Carmen Librero).

Cabe recordar que desde que el socialista Pedro Sánchez llegó a La Moncloa en junio de 2018, ha colonizado las empresas públicas, semipúblicas y hasta privadas con personas afines y socialistas, especialmente catalanes y andaluces. Un buen ejemplo de ello se pudo ver en Renfe, donde primero se eligió al socialista catalán Isaías Táboas y más tarde a Raül Blanco. Pero el conflicto con Talgo por los retrasos de los trenes Avril y el caos ferroviario han provocado que Óscar Puente eligiera a una persona más afín y no ligada al PSC: Álvaro Fernández Heredia. Eso sí, el cambio se vendió como “motivos personales” de Blanco, que semanas después ha pasado al sector privado: ha sido nombrado director de Estrategia de SAPA, empresa proveedora de tecnologías de movilidad que preside Jokin Aperribay y que es la tercera accionista de Indra.

Desde que Sánchez llegó a La Moncloa, en la presidencia de Renfe han estado los socialistas catalanes Isaías Táboas y Raül Blanco, a este último le relevó Álvaro Fernández Heredia. Eso sí, Blanco se ha unido a SAPA, una empresa privada vasca que es la tercera accionista de Indra

Entre las empresas públicas que dependen del Departamento de Óscar Puente, destaca AENA, donde el socialista catalán MauriciLucena está a los mandos desde el 16 de julio de 2018. Claro que el ministro Puente también contenta a los vascos, pues Luis Pedro Marco de la Peña, que fue viceconsejero de Infraestructuras y Transporte del Gobierno vasco, preside Adif desde el pasado 17 de septiembre; y el socialista vasco José Antonio Santano es secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, así como presidente de Enaire (empresa pública dueña del 51% de AENA). Además, en la ingeniería y consultoría pública Ineco, la silla de presidente la ostenta el economista gallego Sergio Vázquez Torrón desde enero de 2022, cuando tomó el relevo a Carmen Librero, tras haber sido secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, entre otros cargos. Ahora, al parecer, la Generalitat de Cataluña que preside el socialista catalán Salvador Illa está conversando con el Gobierno central para ser accionista de Ineco. ¿El motivo? Illa quiere apoyo para su ambicioso plan de inversiones hasta 2030 de 18.500 millones de euros.

El PSC también fue influyente en su día dentro del operador de satélites Hispasat (antes de Redeia -presidida por la exministra y amiga de Sánchez, Beatriz Corredor- y que recientemente ha comprado Indra), pues lo presidió Jordi Hereu. Este último dio el testigo al astronauta y exministro Pedro Duque cuando fue elegido ministro de Industria y Turismo y de su Departamento depende Paradores, cuya presidencia fue un premio de consolación para la exministra y socialista catalana RaquelSánchez por no estar incluida en el tercer Gobierno Sánchez… y que provocó que Pedro Saura fuera recolocado al frente de Correos para intentar arreglar el desastre de otro amigo de Sánchez (Juan Manuel Serrano), a quien se recolocó como director general de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT).

El PSC ha ganado la de Telefónica, donde el Estado posee un 10% del capital a través de la SEPI. Moncloa decidió cesar a José María Álvarez-Pallete como presidente de la teleco y elegir a Marc Murtra, quien hasta ese momento estaba al frente de Indra (de la que el Estado controla el 28%)

Conviene subrayar que tras perder la presidencia de Renfe, el PSC ha ganado la de Telefónica, donde el Estado posee un 10% del capital a través de la SEPI. Moncloa decidió cesar a José María Álvarez-Pallete como presidente de la teleco y elegir a MarcMurtra, quien hasta ese momento estaba al frente de Indra (de la que el Estado controla el 28%). El Sanchismo colocó a Ángel Escribano como nuevo presidente de Indra, pues la empresa Escribano Mechanical & Engineering es su segundo accionista (con un 14,3%), por delante de SAPA y Amber Capital (la sociedad de Joseph Oughourlian, quien por ahora se resiste a perder el control de PRISA, pese a la presión de Moncloa). Por ahora, Indra no venderá Minsait, como refirió Ángel Escribano hace unos días en el Congreso de los Diputados.

Claro que en el tema de las empresas públicas y semipúblicas no hay que olvidar que la SEPI depende del Ministerio de Hacienda que lidera María Jesús Montero, quien hace valer la cuota andaluza. Así, Belén Gualda preside la SEPI y Ricardo Domínguez es el presidente de Navantia, entre otros. Además, el holding empresarial público posee el 5% de Enagás, donde el Sanchismo eligió a Arturo Gonzalo como CEO y sacó a todos los consejeros relacionados con el PP excepto a la exministra Ana Palacio.