El apagón masivo de electricidad que llevó a negro a toda la Península Ibérica el pasado 28 de abril ha hecho mella en el Gobierno Sánchez. En plena investigación para conocer lo que causó el gran apagón, con la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, SaraAagesen, diciendo que “son varias las causas y varios los responsables” en una reciente entrevista en Onda Cero, en Moncloa se ultima un plan para colocar a ÁngelSimón, exCEO de Criteria Caixa y que tiene relación con el PSC, al frente de las fusionadas Redeia-Enagás.

Con esta maniobra se ‘conseguiría’, además, el cese simulado -y hasta elegante- de Beatriz Corredor como presidenta de Redeia. Tras el apagón está sentenciada, pero aún no ha sido cesada porque eso supondría reconocer la metedura de pata de la compañía que transporta electricidad y gestiona el sistema eléctrico español, así como del Gobierno en general y de Corredor en particular. Recuerden que se trata de una exministra socialista y amiga personal de Pedro Sánchez, que fue colocada al frente de Redeia sin tener experiencia en el sector energético en febrero de 2020, en sustitución del también exministro socialista Jordi Sevilla. Este último se había atrevido a quejarse de la injerencia del Gobierno en la compañía, en especial a través de TeresaRibera (entonces vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico),... y lo pagó caro.

El plan de unir Redeia y Enagás (empresa transportista de gas y gestora del sistema gasista español) no es nuevo, sino que supondría volver al origen y a lo que sucede en otros países europeos, donde hay un único operador de los sistemas eléctrico y gasista. Una sugerencia: podría denominarse 'empresa nacional de redes energéticas ( que acabaría en el acrónimo ENRE). Hace casi dos años, ya se rumoreó esa posible fusión, pero en la Junta de Accionistas la propia Corredor respondió que “no tiene sobre la mesa, ni siquiera un estudio preliminar” y no le constaba “ningún movimiento en ese sentido ni por parte de la compañía a la que se refiere (en alusión a Enagás), ni de la nuestra (Redeia), ni del legislador (Gobierno)”. Y meses más tarde, tras los malos resultados de ambas compañías, resurgió el rumor fusión, justo cuando las redes pasaron a considerarse como uno de los puntos fundamentales de la transición energética. 

Ojo, no sería una fusión total de Redeia y Enagás, sino de las redes públicas de luz y gas de ambas compañías. Cabe referir que aparte de los negocios regulados (las redes y la operación de los sistemas eléctrico y gasista) también cuentan con negocios privados. En sus accionariados no sólo está presente el Estado, sino accionistas privados, como el empresario textil y hombre más rico de España AmancioOrtega, y varios fondos de inversión (entre ellos, BlackRock, el colonizador de la bolsa española). Sin embargo, no resulta demasiado apropiado que un fondo como BlackRock esté en el capital de dos empresas tan importantes para la operación y distribución energética de nuestro país.

En Redeia, el Estado está presente con un 20% a través de la SEPI; le sigue el fondo colonizador que lidera Larry Fink, con un 5,003%; y el fundador y primer accionista de Inditex, con un 5%

En el caso de Redeia, el Estado está presente con un 20% a través de la SEPI; le sigue el fondo colonizador que lidera LarryFink, con un 5,003%; y el fundador y primer accionista de Inditex, con un 5%. Dejando a un lado los negocios regulados (agrupados en Red Eléctrica y entre los que se incluye la central hidroeléctrica reversible Salto de Chira que está levantando en Gran Canaria), cuenta con una gran diversidad de negocios privados: el transporte de electricidad en varios países de Hispanoamérica (a través de Redinter), el mayor operador de fibra óptica oscura en España (Reintel), el operador de satélites Hispasat, la compañía que ofrece soluciones innovadoras y de alta calidad en infraestructuras eléctricas (Elewit). 

En relación al apagón, este jueves, Corredor ha señalado que “el primer interesado en que se esclarezca y se conozcan hasta el final” las causas es Red Eléctrica de España (REE), en el VI Foro Internacional Expansión. Además, ha añadido el compromiso de la compañía en transladarle “la verdad a la opinión pública, a la CNMC y al Ministerio”. Veremos. 

Por su parte, en Enagás, el primer accionista es el Estado, con un 5% a través de la SEPI y derecho de veto (como en el caso de Redeia); le sigue: BlackRock (5,006%), Ortega (5%), BankofAmerica (3,614%) y el fondo QRT Master Fund-Torus Fund (1,010%). Aparte de sus negocios regulados, también tiene otros privados, como: participaciones en gasoductos y plantas de regasificación de otros países, una filial de renovables (en la que también está presente Amancio Ortega con un 5%), actividades relacionadas con los gases renovables, proyectos de hidrógeno renovable (entre ellos, el famoso hidroducto H2Med) y la filial Scale Green Energy (que desarollará  otras infraestructuras y servicios para la descarbonización en ámbitos como el CO2, bunkering (suministro de combustible a buques) de GNL y BioGNL, hidrógeno renovable para la movilidad y amoniaco verde).

En Enagás, el primer accionista es el Estado, con un 5% a través de la SEPI y derecho de veto (como en el caso de Redeia); le sigue: BlackRock (5,006%), Amancio Ortega (5%), Bank of America (3,614%) y el fondo QRT Master Fund-Torus Fund (1,010%)

Si al final se fusionan las partes reguladas de Redeia y Enagás, se pondría al frente a Ángel Simón, quien es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, y cuenta con experiencia en el sector de infraestructuras, en especial en el tema de la reutilización del agua y en sus redes, pues ha trabajado en Suez y Veolia, por ejemplo. Y el actual CEO de Enagás, Arturo Gonzalo, podría quedarse al timón de los negocios privados de Enagás, en especial, de lo relacionado con el hidrógeno verde, pues este jueves ha destacado que ver el H2Med como una utopía es “no querer ver la realidad”, en el VI Foro Internacional Expansión, pero ha vuelto a olvidar que hoy por hoy el transporte del hidrógeno verde es un negocio ruinoso y que es mucho mejor producirlo al lado de donde se va a consumir. Eso sí, no parece probable que ocurrirea lo mismo con Corredor y permaneciese a las riendas de la parte privada, algo para lo que se podría pensar en el actual CEO de Redeia, Roberto García Merino

Y por cierto, la fusión de los negocios regulados de Redeia y Enagás gusta a Manuel de la Rocha, secretario de Estado y director de la Oficina de Asuntos Económicos y G20 en la Presidencia del Gobierno. No hay que olvidar que, hasta ahora, lleva varios errores cometidos (Telefónica, Indra, rescate de Air Europa...) y que está disgustado porque Pedro Sánchez aún no le ha premiado con ningún Ministerio. A ver si De la Rocha se convierte en el eslabón más debil de la economía sanchista.