Este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, se ha dado a conocer, en plan muy técnico, el informe del Comité de análisis de las circunstancias que concurrieron en el cero eléctrico del pasado 28 de abril, que se aprobó en la tarde de ayer (en la 14ª reunión del citado comité). SaraAagesen ha fracasado tanto en su intento de defender a BeatrizCorredor, la exministra socialista y amiga de PedroSánchez que preside Redeia, como en concretar el origen de lo que pasó: “tuvo un origen multifactorial, una combinación de factores”.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha detallado que entre dichos factores había: un fenómeno de sobretensiones, el sistema no disponía de suficiente capacidad de regular la tensión, los grupos de generación que tenían que funcionar no absorbieron toda la energía reactiva que se esperaba, las oscilaciones, las desconexiones (“algunas fueron indebidas”). En fin, “una reacción en cadena imparable una vez iniciada”. Eso sí, ha subrayado una y otra vez, que el informe del citado Comité (que también se ha elevado al Consejo de Seguridad Nacional y al Consejo de Ministros) ha cumplido su mandato de identificar las causas y plantear medidas, y llama a la reflexión, pero “no hace ningún juicio”... algo que se delega a las actuaciones de la CNMC y los tribunales (tanto el regulador de la Competencia como la Audiencia Nacional han iniciado sus propias investigaciones), que son las que “aclararán responsabilidades”. Además, Aagesen no ha concretado tipos de instalaciones ni empresas, pues el informe ha preferido el anonimato al respecto, teniendo en cuenta tanto la “transparencia” como “la obligación de confidencialidad”, y de hecho, pedirá comparecer en la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso de los Diputados.

En su intervención inicial, la vicepresidenta tercera ha señalado que el pasado 28 de abril, el “episodio inédito en la Península causó dificultades en el tejido productivo, la sociedad, la vida de los ciudadanos...” y ha destacado su civismo. Lástima, que no ha tenido ni el más mínimo recuerdo para las al menos 10 personas que fallecieron a causa del “cero eléctrico”. Y eso sí, no ha escatimado en echarse flores, al referir que desde que ocurrió “nos hemos dedicado sin descanso a buscar las circunstancias” y el Comité creado ha cumplido su mandato en “49 días, la mitad del tiempo que da Europa a España para que presente su informe a la Comisión Europea”.

La vicepresidenta tercera no ha tenido ni el más mínimo recuerdo para las al menos 10 personas que fallecieron a causa del “cero eléctrico”

Aagesen ha dado demasiados detalles de cómo se ha estructurado el citado informe “que no es un examen judicial”: según grupos, claves técnicas, fases... Tras “la mayor investigación en ciberseguridad” se ha vuelto a constatar lo que Redeia ya explicaba desde el primer día post-apagón, aunque Sánchez tardó más en descartarlo: “No existe evidencia de ciberincidente o ciberataque”, pero ha añadido que sí se han detectado “vulnerabilidades (carencias o faltas de seguridad)”.

Sobre la operación del sistema, la vicepresidenta tercera ha referido que el día anterior al apagón, Redeia “programó 10 centrales térmicas para el control dinámico (el que realizan los generadores síncronos) de la tensión que estuvieran disponibles a cambio de compensaciones económicas”, lo que lleva a pensar que se está refiriendo a ciclos combinados de gas. Sin embargo, una de dichas centrales “se declaró indisponible y el operador del sistema reajustó y decidió reprogramar, pero no sustituir esa necesidad”. O sea, un fallo de Redeia. El día 28, sobre las 10:30 horas, hubo “distintas llamadas a los centros de control de empresas advirtiendo de las variaciones de tensión”, aunque estas “estaban dentro de los límites máximos y mínimos”. Aagesen ha remarcado que en “España y Turquía recibimos con mayor amplitud las oscilaciones por la baja interconexión”, pero la que hubo a las 12:03 horas fue “atípica” y su origen estuvo “en la Península Ibérica por un comportamiento anómalo de una instalación”. También influye el mallado de la red (cuando más alto sea, más aumenta la tensión del sistema) y se intenta corregir reduciendo la exportación de energía a Francia... pero la bajada de la generación también afecta a la subida de tensión, y ese día “las centrales térmicas no estaban regulando tensión” al nivel que se esperaba. Y entre las oscilaciones hubo una de una instalación concreta en el suroeste de España, en concreto de una fotovoltaica. 

Los factores con los que el Gobierno explica el apagón: un fenómeno de sobretensiones, el sistema no disponía de suficiente capacidad de regular la tensión, los grupos de generación que tenían que funcionar no absorbieron toda la energía reactiva que se esperaba, las oscilaciones, las desconexiones (“algunas fueron indebidas”)

Al no lograrse regular el aumento de tensión, empezaron a registrarse “desconexiones de plantas pequeñas que el operador no ve al estar en la red de distribución” en Granada, Badajoz, Sevilla, Huelva, Cáceres,... “Las desconexiones se dispararon por la sobretensión, unas ocurrieron de manera indebida y otras dentro de los límites para proteger sus instalaciones”, ha subrayado Aagesen. Algo que sucedió en segundos y “ya no había nada que hacer”. 

Y respecto a plantear medidas, se ha hablado de las interconexiones y también se va a sacar un procedimiento (en el que la CNMC trabajaba desde 2019) por el que las energías renovables instaladas entre 2020 y 2021 podrán regular la tensión de forma dinámica (como hacen actualmente los generadores síncronos -bombeos, nucleares, ciclo combinados de gas-) y no por factor de potencia. Por tanto, con dicho procedimiento, al parecer, se necesitará menos de ciclos combinados para tener el mismo control de tensión,... Veremos si es así o no. 

En definitiva, para el Gobierno Sánchez no hubo una única causa, aunque la mayoría de los expertos han referido que había exceso de renovables y hasta The Telegraph ha hablado de ‘experimento’ con este tipo de energías. Todo esto en Moncloa, por supuesto, se considera un bulo... pero ya saben cómo han acabado otros bulos. Además, Aagesen sigue apostando por las energías verdes y eludiendo la gran decisión sobre las nucleares, y no ha tenido ningún reparo en afirmar que “la transición ecológica no es ideológica sino un vector de crecimiento de este país, un motor de atractivo”. 

Y entre las primeras reacciones al informe del famoso Comité está la de José Bogas, CEO de Endesa. Este teme que apagón acabe “en los tribunales”, pero le gustaría que “no hubiera acusaciones a nadie”. Asimismo, ha recordado que el sistema eléctrico funciona con energías síncronas y asíncronas (la solar, la eólica) y estas últimas hacen perder inercia al sistema, que es “menos flexible y más vulnerable”, algo que considera que seguirá siendo así mientras no se avance en almacenamiento o en reactancia. Además, ha referido que Red Eléctrica decidió un cambio de gestión de la interconexión con Francia, lo que redujo aún más la inercia del sistema hasta que se produjo el apagón total, y no ha descartado que también pudiera “fallar alguna central”. 

En resumen, si nadie tuvo la culpa y las causas fueron multiples: ¿cómo podremos impedir que se repita otro apagón general? La vicepresidenta intentó paliar su soporífero informe con una constante pedantería, que convirtió su discurso en ininteligible e insulso. Esta chica no habla en cristiano. Claro que a lo mejor era eso lo que pretendía.

Aagesen no convenció a nadie en su defensa de Beatriz Corredor y, lo que es peor, seguimos sin saber la causa dal apagón... con lo que nadie nos asegura que no vuelva a repetirse.