Los resultados de su primer semestre fiscal (abril-septiembre) dejan ver que Toyota y Suzuki son la cara y la cruz de la industria del automóvil japonés. Y es que mientras la primera ha subido su beneficio neto un 2,6%, en la segunda se ha desplomado un 41,8%. Eso sí, conviene destacar que ninguna de las dos produce en España, como hacen otros miembros del sector (Volkswagen, PSA, Renault o Ford, por ejemplo).

Toyota ha ganado 10.565 millones de euros en su primer semestre, lo que supone un 2,6% más que hace un año, y ha logrado un beneficio operativo récord de 11.647 millones (+11,3 %). Asimismo, la facturación ha ascendido a 126.450 millones (+4,2), un nuevo récord, gracias a la venta de 5,45 millones de vehículos (+3%), aunque tendrá complicado recuperar el liderazgo mundial que le arrebató el grupo Volkswagen. Respecto a las previsiones anuales, Toyota mantiene las que hizo en el primer trimestre: espera que el beneficio neto suba a 17.886 millones (+14,2%), el beneficio operativo baje a 19.965 millones (-2,7%) y que la facturación retroceda un 2,4 % hasta los 245.410 millones.

Por su parte, Suzuki ha ganado 656 millones entre abril y septiembre, lo que supone un 41,8% menos, por la menor producción en Japón y la caída de las matriculaciones en India. El beneficio operativo cayó un 40,2%, hasta los 981,4 millones y los ingresos un 9%, situándose en 14.526 millones. De cara al conjunto del ejercicio fiscal, Suzuki no espera mejoras: prevé que un beneficio de 1.158 millones (-21,7%), una ganancia operativa de 1.654 millones (-38,3%) y una facturación de 28.691 millones (-9,6%).