Parece que Arabia Saudí sigue marcando el precio del petróleo mundial, pese a que EEUU le supere en producción y se haya convertido en exportador (de hecho, el pasado junio también le ganó en este aspecto, según indicó la Agencia Internacional de la Energía -AIE- hace dos semanas) gracias al fracking. No obstante, no se puede obviar que Arabia Saudí es uno de los cinco socios fundadores de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y el más importante de los 14 que la conforman (el próximo 1 de diciembre pasarán a ser 13, tras la marcha anunciada por Ecuador).

Como saben, el reino saudí sufrió un ataque con drones -que fue reivindicado por rebeldes yemeníes huthis- en dos refinerías de su petrolera estatal, Saudi Aramco, el pasado 14 de septiembre. Esto le obligó a reducir casi la mitad su producción, dejándola en 5,7 millones de barriles diarios, y provocó que se disparara el crudo más de un 15%, situándose por encima de los 69 dólares el lunes 16 de septiembre.

El príncipe saudí y ministro de Energía, Abdulaziz bin Salman, afirma que han superado "los 9,9 millones de barriles diarios de una capacidad estabilizada" y están en 11,3 

Ahora han pasado algo más de dos semanas de los citados ataques y los saudíes ya han recuperado y superado los niveles de producción (9,8 millones de barriles diarios) que tenían antes de los mismos. Así, lo ha señalado el príncipe saudí y ministro de Energía, Abdulaziz bin Salman, en un acto de la Semana de la Energía de Rusia: “Hemos estabilizado la capacidad de producción” e “incluso hemos superado los 9,9 millones de barriles diarios (mbd) de una capacidad estabilizada y estamos en 11,3 mbd”.

Esto también ha tenido su influencia en el precio del petróleo, que desde los ataques a las refinerías saudíes, ha ido bajando progresivamente. Actualmente, está en el entorno de los 58 dólares, mínimos que no se veían desde principios del pasado agosto. Pero esto no sólo se debe a la influencia saudí, también a los nubladas perspectivas de crecimiento que sobrevuelan algunas economías desarrolladas.

EEUU lideró la producción mundial de petróleo y gas natural en 2018: en crudo ganó a Arabia Saudí y desde 2011 supera a Rusia en gas

Y aunque EEUU aún no marque el precio del oro negro, su papel es relevante. De hecho, lideró la producción mundial de petróleo y gas natural en 2018, según anunció la Administración de Información de Energía (EIA) estadounidense. Este país ya superó en 2011 a Rusia, convirtiéndose en el primer productor mundial de gas natural, y el año pasado logró hacer lo mismo con Arabia Saudí en el caso del petróleo.

Todo ello, gracias al fracking, es decir, la fractura hidráulica: una técnica para extraer gas y petróleo que está en capas de roca a gran profundidad, rompiendo estas con agua a presión mezclada con productos químicos. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha apostado por el fracking fractura hidráulica-, que en los últimos años ha evolucionado muy rápido y ha reducido el umbral de rentabilidad drásticamente: antes, era rentable cuando el barril de petróleo estaba por encima de 70-80 dólares, ahora no depende de esta cifra, sino más bien de la cuenca y del país en cuestión.