• Y, casualmente, no especifica por cuánto dinero ha vendido la cartera.
  • Aunque asegura que ha ganado 57,4 millones de euros. Claro, sobre las provisiones realizadas anteriormente.
  • Eso sí, destaca el gran interés de los fondos y de las empresas especializadas en cobros de créditos morosos.
  • Todo son ventajas: la entidad de Escotet subraya que ahora podrá centrarse en el 'core' de su negocio.
  • Curioso, porque ¿acaso el negocio bancario no consiste en cobrar los créditos?
Es la primera operación de este tipo que realiza Abanca y, a la vista del comunicado que ha remitido este lunes, se diría que no será la última. Lo cierto es que la entidad de Juan Carlos Escotet (en la imagen) ha comenzado a achicar espacios y ha vendido 1.383 millones de euros de créditos impagados sin garantía hipotecaria a la empresa EOS Spain, especializada en gestión de cobros. El banco resalta el gran interés que ha suscitado la operación, sobre todo entre los fondos de inversión y entre las compañías dedicadas al cobro de morosos. Normal, si como nos tememos, el precio del producto es muy bajo. Porque, miren por dónde, Abanca no especifica por cuánto ha vendido la citada cartera. Posteriormente, ha remitido un hecho relevante a la CNMV asegurando que la operación le ha generado un beneficio de 57,4 millones de euros. Claro, como que es un beneficio sobre las provisiones realizadas anteriormente o, si lo prefieren, sobre las pérdidas previstas por el banco. En definitiva, son beneficios contables, pero no reales. En cualquier caso, todo son ventajas para el banco de referencia en Galicia. Por ejemplo, "con esta venta Abanca continúan su plan de generar valor en el proceso de desinversión de activos no estratégicos", o "al tratarse de deuda totalmente provisionados, tiene también un efecto positivo sobre el ratio de solvencia" de la entidad. No es extraño, pues, que la entidad anuncie que está estudiando operaciones similares en otros segmentos. Todo para lograr un único objetivo: centrarse en el 'core' de su negocio. Y aquí está lo curioso. ¿Acaso el negocio bancario no consiste en cobrar los créditos que ha concedido previamente? Lo peor es que Abanca no ha sido el primero y tampoco será el último que renuncie a ese ejercicio bancario. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com