Sr. Director:
"Cobro de comisiones que iban a parar a cuentas andorranas y suizas a cambio de adjudicaciones".

Este es el resumen de las acusaciones que recaen sobre dos pesos pesados de la política catalana, Macià Alavedra y Lluís Prenafeta, históricos en los gobiernos de Jordi Pujol. Es llamativo cómo todos los grandes valedores de Mas están imputados o bajo sospecha por corrupción.

Prenafeta fue su amigo y le contrató en su propia empresa; Macià Alavedra fue su consejero en diferentes asuntos y su predecesor en la consejería de economía; Fèlix Millet, condenado por el Palau de la Música, fue íntimo suyo y de su entorno y Jordi Pujol, evasor fiscal confeso, fue su "padre político".

También Mas fue Conseller de Infraestructuras y dice que nunca supo nada del famoso 3% de comisiones en las obras públicas catalanas y fue Conseller de Economía durante los años gloriosos de los Pujol y dice que tampoco vió nunca nada raro. Es sorprendente: el actual President, rodeado durante toda su trayectoria, por un ambiente que desprendía aromas de corrupción de forma nauseabunda y él diciendo que lo veía todo limpio y sólo olía a colonia. Muy curioso lo de Mas.

Teresa Lozano