• Técnica Escotet. Malvendiendo fallidos disfrazo la ruina del negocio.
  • Escotet no presenta resultados sino un cómic financiero.
Comenzamos la temporada de verano en lo que se refiere a las presentaciones de resultados de las principales sociedades de nuestro país y, normalmente, en lo referente a las entidades financieras ha venido siendo norma que las de mayor calado, en especial Banco Sabadell o Banco Santander, hayan dado el primer paso, pero esta vez, por sorpresa, ha sido el banco de Juan Carlos Escotet (en el medio de la imagen), esto es, Abanca, el que se ha adelantado a los grandes y ha presentado sus resultados correspondientes al primer semestre del presente ejercicio. Bueno, ha presentado es un decir, más bien como en la presentación de los resultados a diciembre, nos ha vuelto a obsequiar con un auténtico cómic más o menos financiero, lleno de datos comerciales, muy en la línea de su web corporativa y las campañas comerciales con las que últimamente nos está obsequiando con sus personajes "Plácido y Serena" montados en su bicicleta-tándem, camino de su tarifa plana de seguros. Vamos, una tomadura de pelo para los inversores y clientes que como mínimo quieren saber cómo va la entidad donde están depositando sus ahorros o comprando productos financieros o de seguros. Es lo que hay, y mientras los reguladores no tomen cartas en el asunto y exigiendo un mínimo de rigor y contenidos financieros en los folletos de información, las entidades seguirán aprovechando éstos para su autobombo y prolongando en ellos sus campañas de marketing. Pues vamos a ver con lo que nos han dado, que podemos sacar en claro sobre cómo ha ido el primer semestre para el banco gallego. Primero, que ha alcanzado los 186 millones de euros de beneficio neto, que suponen un 2% más que en el mismo periodo del 2015, y que continua la sangría en las entidades financieras por los márgenes de intereses: 199M€, -9% respecto a 2015. No es de extrañar que Abanca se haya dado cuenta que, con la situación actual de tipos, el negocio bancario clásico no va a salvarle la discreta cuenta de resultados y ha emprendido una campaña publicitaria (la verdad para mi gusto muy 'naif' y empalagosa) para vender productos no financieros, en especial seguros, con la innovación de una tarifa plana en sus primas, que, por cierto, han crecido un 39% desde junio de 2015 llegando a los 20,6 millones de euros. En este mismo sentido ha ido el crecimiento de los productos de inversión colectiva que crecen un 8,8% interanual hasta los 4.378M€, recordándome esta estrategia a tiempos de crisis pasadas en las que las entidades financieras ofrecían estos productos como alternativa a los depósitos, pero con una diferencia sustancial: la crisis actual está situando a estos productos en rentabilidades por debajo del 0 y cada vez va a ser más difícil su colocación. Pero esos 186 millones de beneficio neto se han conseguido sobre todo con el descenso de provisiones en un 158% y 70 millones más en otros resultados, esto como consecuencia de la venta en el mes de junio de 1.383 millones de la cartera de créditos sin garantías morosos y totalmente provisionados. Vamos, jugada a tres bandas, una, recupera provisiones; dos, ingresa 57,4 millones por la venta y, tres, reduce la ratio de morosidad al 7,6% desde el 9,88% de junio de 2015. Hábil forma de maquillar contradiciendo la que tiene que ser la filosofía de una entidad de crédito, captar recursos, prestarlos y la más importante, cobrar lo prestado con intereses, no malvendiendo los impagados para mantener la cuenta de resultados. Hay una cifra que siempre me produce jocosidad cuando la presentan como una cifra positiva, es la "fortaleza" de las coberturas de morosidad, a junio, Abanca presenta un 60% sobre el total. Señores, si han tenido que dotar hasta esta cifra es que la calidad de sus riesgos es así de mala y acabarán vendiendo otra cartera de créditos totalmente dotados como la de estos meses porque serán incapaces de recuperar nada antes de llegar al 100% de su dotación. Esperemos que las campañas que ha emprendido la entidad encaminadas a la total digitalización de operaciones y a la captación de recursos no puramente bancarios le puedan dar resultados positivos porque carteras de 1.383 millones de euros de impagados no se van a vender todos los días. Rodrigo de Silos rodrigode@hispanidad.com