Sr. Director: Ya que era inevitable escuchar la conversación, despertó mi curiosidad saber cómo acabaría. A quien tenía a mi lado un amigo le estaba contando por teléfono que le había tocado una buena cantidad en la lotería. El interlocutor presente repetía que se alegraba mucho por él. ¿Y qué hizo cuando colgó? Continuó manifestando esa sincera alegría. Alberto Asensi