El presidente electo, José Luis Rodríguez Zapatero, mostró su "apoyo incondicional" a la Argentina, lo que ha sido valorado muy positivamente por Néstor Kirchner. "Apoyo incondicional" significa que las empresas españolas no harán las maletas de una economía insegura gobernada por un montonero. Un mensaje que encaja mal con el discurso liberal de Miguel Sebastián de que el futuro de las privatizadas dependerá de sus accionistas. 

Por otra parte, en Argentina arden los rumores sobre la liberación de varios etarras detenidos en el país austral. ¿Mantendrá Zapatero su apoyo incondicional? ¿Gestionará su repatriación? ¿Negociará? ¿El qué?