El Gobierno Zapatero se inventó una fundación que permitiera direccionar las ayudas presupuestarias del Estado hacia las confesiones religiosas distintas al catolicismo. Sin embargo, no consiguieron domesticar a ninguna de las tres religiones con reconocida raigambre en nuestro país: judíos, protestantes y musulmanes. Los tres junto a la Iglesia Católica han censurado el proyecto del Gobierno de promover el matrimonio homosexual.

Pero algo ha debido de cambiar en las últimas semanas. La comunidad protestante se ha desvinculado de la manifestación convocada por el Foro Español de la Familia para el próximo 18 de junio. La manifestación está convocada en defensa del matrimonio, la familia y la infancia y contaba con el apoyo de todas las confesiones religiosas. Pero los protestantes se han caído de la convocatoria argumentando que la manifestación iba a ser instrumentalizada con intereses políticos a los que son ajenos.

Curiosamente, la gracia de Carod y Maragall en Tierra Santa también ha generado el apoyo solidario de la comunidad judía y musulmana. No así de la protestante, que en lugar de protestar, como les es propio, han preferido guardar un discreto silencio. Seguro que César Vidal tiene algo que decir al respecto.