Jiménez Losantos intenta convencer al Santander y al Popular de que le financien la compra de un 10% de la COPE. La cadena de los obispos se valora en 180 millones de euros. El director de El Mundo insiste en que Rizzoli estaría dispuesto a comprar el 100% de la COPE, toda la campaña de Jiménez Losantos contra el ABC trataba de excluir a Vocento como comprador de la cadena

Mientras ofrece su vida por la unidad de España, el locutor estrella de la COPE Federico Jiménez Losantos, aún tiene tiempo para sabotear la alianza entre la cadena COPE y el grupo Gaceta de los Negocios. Y es que el principal objetivo de FJL, acompañado de su colaborador, el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, consiste en hacerse con la cadena COPE, a ser posible con poco dinero.

Veamos: los principales intentos últimos para adquirir la cadena de los obispos han sido los siguientes. En primer lugar el de Rizzoli-Corriere della Sera, la multinacional italiana propietaria de El Mundo. RCS estaba dispuesto a adquirir el 100% de la cadena COPE, pero los obispos se negaron. Además, el propio Jiménez Losantos es muy consciente de que su inseparable amigo, Pedro José, podría dejar de serlo en cuanto no le necesite.

Es entonces cuando surge la oferta de Vocento, que ya estuvo en el accionariado de la COPE. La alianza acabó muy mal cuando la Conferencia Episcopal se negó a cederle el control de la COPE a José María Bergareche, el hombre fuerte de Vocento-ABC. Fue en ese momento, pura coincidencia, cuando don Federico arremetió contra el diario ABC y contra su director José Antonio Zarzalejos, por su supuesta ambigüedad (a veces más que supuesta) ante el llamado proceso de paz en Euskadi. La cosa está ahora en los tribunales porque el ABC ha demandado a FJL. Incluso durante una de sus emisiones FJL llegó a señalar con el dedo a Zarzalejos diciendo : Tú lo que quieres es cerrarme la boca, comprarme. Lo de comprar era algo más que una metáfora.

Es entonces, cuando don Federico se convence de que sólo siendo él, en persona, quien compre la COPE podrá controlarla de derecho como ahora la controla de hecho. Apalabra financiación con los bancos Santander y Popular, para adquirir la autocartera de la COPE que roza el 10%. El asunto no es una broma, porque uno de los principales aciertos del nuevo presidente de la COPE, Alfonso Coronel de Palma consiste en certificar el valor de la cadena, más que nada para desanimar a posibles listillos. Dicho de otra forma, la cadena de los obispos aviso para navegantes- vale 180 millones de euros. Quien quiera comprar su autocartera, deberá pagar 18 millones de euros o 3.000 millones de las antiguas pesetas.

Es entonces, cuando la defensa de la unidad de España y de las libertades individuales exigen un nuevo esfuerzo por parte de Jiménez Losantos, quien ha aprendido a moverse en los círculos económicos (un detalle: sólo en material para su minitelevisión local, Libertad Digital TV, y sólo para la sede de Madrid se ha gastado la bonita cantidad de un millón de euros). Por ello, Don Federico acude a su mentor político favorito, el número tres del Partido Popular, Eduardo Zaplana, el portavoz parlamentario del PP es todo un hombre de negocios, por supuesto de alma laica y en los círculos financieros madrileños ya se habla de los constructores valencianos de Eduardo. Zaplana, Pedro J. Ramírez y Jiménez Losantos forman un trío de buenos amigos, en el que sólo se permite la entrada transitoria de Agatha Ruiz de la Prada. Sólo que Zaplana tiene un gran problema para la operación COPE: los obispos confían en él tanto como en Pedro José y en Federico.

En esas llega Coronel de Palma y plantea una alternativa: lo que tiene que hacer la COPE es mantener su independencia e intentar forjar un grupo multimedia con alguien afín a su ideario : Gaceta de los Negocios. Y nada de intercambio de cromos. Se trata, como ya informáramos en Hispanidad de que Gaceta compre la autocartera de la COPE, -es decir ponga 18 millones de euros sobre la mesa- mientras que la COPE adquiere el 24,9% de Negocios.

¡Qué casualidad! Poco antes de hacerse pública la noticia, don Federico arremetía contra Gaceta de los Negocios acusándole de ser un híbrido de información general e información económica, y aconsejándole que volviera al salmón puro y duro. Tanto él como Pedro José saben que la unión de ambas compañías supondrá el principio del fin de su regencia en la COPE.

Por tanto, a día de hoy, sólo hay un objetivo en el que coinciden fuerzas tan dispares como los fontaneros de comunicación de la Moncloa a su frente don Fernando Moraleda-y grupos editoriales como Unedisa, Vocento, Planeta o Prisa: sabotear la unión entre Cope-Gaceta, de la que resultaría el primer multimedia español de ideario cristiano. Sí, también Prisa, Juan Luís Cebrián no deja de recordar a La Moncloa, la estupidez de haber promocionado La Sexta, rompiendo de este modo el dulce monopolio del que disfrutaba Prisa-Sogecable en el espectro político-mediático de centroizquierda. Pero los más interesados en sabotear el proyecto son don Federico y don Pedro José, por razones obvias.