Esa OPA no sólo va a cambiar el sector energético español y europeo, sino probablemente todo el entramado del poder en España. Desde luego, a Zapatero : nunca un presidente del Gobierno se comprometió tanto en una operación financiera. Por eso ahora, juega a órdago.
Decíamos ayer, que el Ejecutivo Zapatero impulsaba una OPA española, anti-E.ON, con La Caixa, el Santander, y Caixa Catalunya, todos unidos para ofrecer 30 euros por acción, frente los 27,5, (menos 2,4 de dividendo, quizás otros 2) que ofrece la compañía alemana E.ON. Otras cajas se sumarían al embrollo, pero a la salsa todavía le faltaba alguna especie. Y el Gobierno la ha encontrado. ¿Dónde? En el sector más pujante que ahora mismo existe en España. Está claro, si Florentino Pérez toma Fenosa, por qué no puede Acciona, es decir, la familia Entrecanales, capitanear la escuadra española frente al pérfido alemán?
Antes de nada, no convine olvidar que el zapaterismo es mucho más sectario que el aznarimo o que el felipismo. Para la Moncloa están los nuestros y los otros. Por ejemplo, las familias Entrecanales y del Pino (ambas, pura casualidad, con espléndidas relaciones con Jesús Polanco) son de los nuestros. Mientras que, por decir algo, Florentino Pérez es de los otros. Por tanto, un hombre como José Manuel Entrecanles, que envidia a Florentino Pérez, con quien nunca se ha llevado bien- y un Rafael del Pino, ambos con apabullante liquidez, son dos candidatos idóneos para colocarle Endesa a tiro fijo.
Pues bien, José Manuel Entrecanales, ahora sí al frente de Acciona, ha acogido la propuesta con entusiasmo. Eso sí, el problema es: ¿quién manda en la resultante, Acciona o La Caixa? Entrecanales puede convertirse en rey del sector energético, pero hacerlo en solitario pude ser muy duro. Por otra parte, Gas Natural, como es lógico, busca aliados, pero no jefes.
Es ahí donde el omnipresente Miguel Sebastián ha vuelto a rizar el rizo. Pues ya está: Zapatero puede matar dos pájaros de un tiro : doblarle el pulso a Angela Merkel (odio cordial y diplomático, el que se profesan ambos estadistas) y además crear su nueva beautiful people si escuchara a Felipe González, sabría que eso no debe hacerse jamás (los empresarios amigos sólo acarrean problemas). Y para empezar a crear la clase empresarial afín a ZP, nada mejor que conquistar La Caixa.
Ojo al dato. Al menos por dos ocasiones, Hispanidad ha podido saber que el director de El diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, ha dicho palabras muy parecidas por eso no las entrecomillamos- a estas: Cuando Brufau sea quien mande en La Caixa a ver qué pasa con el presidente de Telefónica, es decir, con enemigo César Alierta.
Y, miren por dónde, hoy en la entidad catalana no dejaban de leer y releer el texto del periodista Félix Martínez que sólo en contadas ocasiones firma sus artículos. En El Mundo. No es la información de la OPA, no, sino un añadido (página 14 de la edición madrileña). Y la enjundia no está en el titular. No, sino en los últimos párrafos, donde se alaba la figura del presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau (nada más mortífero que el elogio) y se habla de una campaña para llevar a Jordi Mercader a la Presidencia de La Caixa, ante un Fornesa que habría fracasado en la OPA y un Isidro Fainé que estaría intentando que Fornesa se quede hasta el 2009 para asegurarse el cargo de director general. Y como todo ello no se dice que se insinúa, vamos con los hechos.
Los hechos s que, en efecto, desde Moncloa, no desde la Generalitat, desde el PSOE, no desde el PSC, se intenta conquistar La Caixa para el partido, con el cambio del socialista Jordi Mercader por el sospechoso de conservadurismo Ricard Fornesa, actual presidente. No sólo eso, sino que, utilizando las palabras del director de El Mundo, que no las del periodista, no sólo se trataría de un relevo en la Presidencia (de derecho no ejecutiva, de hecho bastante ejecutiva) sino de terminar, también, con Isidro Fainé para que, al final, sea Antonio Brufau quien mande en La Caixa.
Eso es lo que quiere Moncloa, y para eso es imprescindible que Fornesa abandone voluntariamente o que el Consejo se lo ponga muy complejo. Esperemos que tal cosa no ocurra, porque eso sería tanto como ceder ante otra intromisión gubernamental encima utilizada por un periódico para saldar cuentas personales.
Volviendo a la OPA. Es cierto que todos los constructores quieren ser energéticos (y poseer, también, una operadora de telecos). Lo quiere Entrecanales, lo quiere Del Pino y hasta lo quiere Rafael Montes, presidente de FCC, quien en la mañana del jueves 23, durante la presentación de los resultados correspondientes al Ejercicio 2005, se hacía un verdadero lío pero dejaba claro el mensaje: si nos llaman, nosotros también participaríamos en la operación. Lo que desconocía Montes es que, en esos mismos momentos, los Entrecanales, los peores enemigos de FCC, a los que tienen en su capital como una espina sangrante, han sido los primeros elegidos para la gloria por La Moncloa y por Miguel Sebastián. Si los Entrecanales dicen sí, ni Del Pino ni Ferrovial pintarían nada. Además, insistimos en el sectarismo imperante en el PSOE actual: Esther Koplowitz no es de los nuestros.
Mientras tanto, alguien ha propuesto poner un anuncio en los periódicos con la siguiente leyenda: Se busca vicepresidente económico. Desaparecido hace una semana. A quien pueda dar noticias de su paradero, se ruega contacte con el Congreso de los Diputados, sede de la Soberanía Popular. Aunque, bien pensado, la empresa es una cuestión política, no económica como todo el mundo sabe.