Traslación fiel del best seller de Gillian Flynn (quien también ha escrito el guión), poco puede adelantarse sobre el original desarrollo de Perdida para no desvelar los sorpresivos giros argumentales que encierra. Su arranque nos lleva hasta el estado de Missouri donde, en el quinto aniversario de boda de una joven pareja, Nick y Amy, ésta desaparece misteriosamente sin dejar rastro. Desde el primer momento, el marido (principal sospechoso) manifiesta su desconocimiento y su inocencia (sólo apoyado por su hermana melliza), mientras una exhaustiva investigación policial va encontrando pruebas que lo incriminan como el posible asesino…
Las falsas apariencias, los engaños, la infidelidad pero, sobre todo, la maldad y el odio en estado puro subyacen en este relato de crónica negra que hace viajar al espectador por la mente de la pareja protagonista, de ahí que algunos calificarán Perdida como un thriller psicológico. En el transcurso del mismo, se hace una descripción acertada de los personajes, no sólo de los dos esposos (llenos de miserias), sino de la hermana leal, la policía eficiente o el abogado de recursos. A más a más, el trabajo de la escritora Gillian Flynn como crítica televisiva antes de dedicarse a la Literatura, se palpa cuando denuncia, de forma humorística pero certera, "la basura" que destilan los "talk shows" y "reality shows" que inundan las televisiones de todo el mundo. Programas que manipulan la información y juegan con las vidas ajenas con el sólo objetivo de atrapar más audiencia. Todo ello desemboca en una película muy entretenida y a la que sólo habría que poner una pega que es una constante en la filmografía del director David Fincher: no tiene la sutileza de suavizar algunos momentos cruciales pero sórdidos del desarrollo, que se hubieran entendido igual sin que las imágenes fueran tan explícitas. A Fincher se le recuerda por títulos tan señalados como La red social o El curioso caso de Benjamin Button.
Encabezan el reparto de este filme tan comercial como atrayente, Ben Affleck, quien está correcto en la piel del marido sospechoso y la actriz británica Rosamund Pike.
Una mirada a la crisis de pareja cuyo argumento, creemos, no agradará a las feministas
Para: Los aficionados a la novela negra que no les importe contemplar alguna escena sórdida