Los datos del Instituto de Política Familiar demuestran los efectos de la ley de divorcio express. A pesar de que la crisis ha frenado los divorcios y de que cada vez son menos los que deciden casarse, el número de rupturas familiares en el primer trimestre de 2010 se incrementó un 4,8% con respecto al mismo período del año anterior. Cada vez más las rupturas se producen de forma definitiva: 30.820 divorcios, 2.245 separaciones y 38 anulaciones en el primer trimestre de 2010.
Además, las rupturas son cada vez más conflictivas: en los tres primeros meses del año, el 40,42% de las rupturas se realizó de forma conflictiva, frente al 59,8% que son consensuadas. Si observamos que en 2009 las rupturas conflictivas se daban en el 37,6% de los casos, se aprecia un crecimiento que se ha consolidado como tendencia.