La Federación Española de Religiosos de la Enseñanza (FERE) trata de justificar su posición en una carta remitida a los superiores y provinciales a la que ha tenido acceso Hispanidad. Aunque la carta está fechada el 5 de noviembre, el contenido hace referencia a la tramitación de la Ley, por lo que es mucho más reciente.
En la misiva, la FERE explica a los superiores y provinciales que ha estado en permanente contacto con la Conferencia Episcopal, obviando que la CONCAPA también ha tenido un permanente vínculo con Añastro. Por otra parte, señala que ellos manifestaron su posición contraria a la manifestación, cuando sin embargo, firmaron un documento en el que se sumaban a la convocatoria. Efectivamente, después dieron marcha atrás a sus palabras y se descolgaron de la manifestacion, hasta que días antes del 12-N decidieron sumarse, aunque esta vez, ya no como convocantes.
Tras el éxito de la movilización social, la FERE ha utilizado ese caudal político para negociar con el Gobierno lo que califican como umbral de lo aceptable. Términos cautos que nada tienen que ver con las palabras laudatorias pronunciadas por su secretario general, el P. Manuel de Castro, en entrevista en El Mundo. En todo caso, al final de la misiva, aseguran que seguirán muy de cerca la aplicación de la Ley para defender los derechos de la educación católica y aseguran que seguirán trabajando por la unidad del movimiento asociativo. Ojalá.