El ministro de Fianzas italiano, Domenico Siniscalco, ha dimitido. No consiguió que el gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, dimitiera y ha sido él quien ha debido poner su cargo a disposición de Silvio Berlusconni. Es la primea vez que un gobernador le gana el pulso a un ministro de Economía.
Fazio se ha distinguido por negarse a que el español BBVA y el holandés ABN compraran entidades en Italia. El caso Siniscalco obliga a replantear todas las relaciones entre Gobierno y bancos centrales en el seno de la Unión Europea.