En plena recesión económica, el presidente de la SGAE anima a Solbes a regalar más dinero a los artistas con él como intermediario, claro

Es lo que tiene escuchar a esas mentes librepensadoras cuando se las deja hablar sin censura. Todo empezó así: en la mañana del martes 4, en Madrid,  el presidente de la SGAE, Teddy Bautista, acudía a un desayuno informativo que organizaba el Foro de la Nueva Economía, en el hotel Ritz.

Junto al cantante, hoy cobrador, se dejaron ver, entre otros, el también cantante Caco Senante, el realizador de televisión Valerio Lazarov, el diputado Rafael Simancas, el músico Luis Cobos y el nuncio de Su Santidad en España, el portugués Manuel Monteiro de Castro, flanqueado a su derecha por el realizador español Manuel Gutiérrez Aragón y a su izquierda por el veterano productor de cine José Luis Borau, estos cuatro últimos sentados en la mesa principal, frente al estrado de ponentes.

Bautista, gran lanzador de balones fuera, realizó una perorata sobre la situación de la industria cultural en España, siempre comparada con Francia e Inglaterra. Porrones de datos soporíferos. ¡Se echaban de menos unos gráficos que hubieran sido más reveladores! Y como hay que hacer amigos, anuncia que hay un proyecto no de ley a la vista, a propuesta de Simancas, que consiste en luchar contra la piratería realizando una estrategia consensuada, eficaz, no retórica y con los contenidos ordenados. El auditorio sigue desayunando. Simancas saborea la caricia.

Llegan las preguntas, seleccionadas bajo mi criterio, señala Juan Cruz, ese censor oficial de autores: lleva 20 años indicando cuáles de ellos promociona el grupo PRISA y cuáles silencia. Después la traca final:

-Dígame tres autores que vivan de la SGAE, le dicen a Bautista.

- Habría que preguntar antes a protección de datos, contesta.

- ¿Si la cultura es universal, por qué aún hay barreras de accesibilidad para los discapacitados?

- Ya hay un acuerdo con agencias como la ONCE y un proyecto arteria de redes culturales; un corpus misticum, corpus mecanicum. Toma ya. Porque si es necesario vamos a sacrificarnos todo lo posible. Y eso lo dice justo antes de sugerirle a Solbes que incremente los presupuestos Generales del Estado para pagar más a los creadores. Suave ruido de cubiertos.

-¿SGAE es una máquina de hacer dinero?

- No es una máquina, es una organización, asegura Bautista visiblemente irritado. Así que cuando quiere explicar La Economía de Escalas, al hilo de los ingresos por comunidades autónomas, se quita el muerto de encima afirmando que sería algo tan difícil como entender la Santísima Trinidad. Recordemos que modera el ilustre-progre Cruz, que va y dice, en tono de sorna, con el permiso de las autoridades eclesiásticas presentes. El nuncio se muerde la lengua y aguanta una pregunta más antes de abandonar el nutrido salón.

- ¿Qué tiene que decir sobre el canon?

Es agua pasada, se paga y ya está, concluye ratificando esa modestia que siempre le ha caracterizado.

Por lo visto había más preguntas, según Cruz: ustedes creerán que he censurado las preguntas que no han salido, pero es que no tenemos tiempo. Murmullos, cubiertos que se caen Siempre hay tiempo para lo que conviene, pero mola más seguir enganchado a la censura, ¿eh Juan Cruz?