Para 'tranquilidad' de todos los españoles a las 11 horas de esta mañana, nuestro presidente, Pedro Sánchez, anunciaba que se queda. Tras sus cinco días de reflexión, ha decidido que lo importante no es él como persona y el acoso que lleva sufriendo nada más y nada menos que 10 años, sino España. Así que por todos, todas y todes, sigue... hacia el totalitarismo. 

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Es decir, que los objetivos a batir por el aprendiz de dictador serán los jueces, los empresarios y los periodistas. Porque el resto de instituciones ya las tiene controladas, como el Centro de Investigaciones Sociológicas, con el inigualable ingeniero social y socialista, José Félix Tezanos, al frente. Sin miedo ni vergüenza, Tezanos lanzaba una encuesta flash el viernes tras conocerse la lacrimógena carta de Sánchez. El presidente amenazó con irse por amor, pero la realidad es que el electorado le ama, o al menos esa conclusión sacamos al ver los resultados del barómetro. 

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De celebrarse elecciones generales hoy, los socialistas arrasarían con casi el 40 por ciento de los votos, 38,6 por ciento, concretamente, casi 10 puntos por encima del Partido Popular (PP), que se sitúa como segunda fuerza con el 29,2 por ciento. Por su parte, Vox obtendría un 11 por ciento de los votos y Sumar, el 7,2 por ciento. 

Merece la pena recodar que, en la última encuesta del CIS del mes de abril, el PP obtenía el 33,5 por ciento, frente al PSOE, que quedaba segundo con un 32,5 por ciento. Pero la carta ha calado y ha cambiado todo. Aunque ojo, porque las malas lenguas aseguran que el CIS es la encuestadora con peor reputación del sector: fue la que más falló en Vascongadas.

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Electomanía ha 'traducido' esta intención de voto en escaños, y el resultado es muy distinto al obtenido por las diferentes fuerzas políticas en las últimas elecciones del pasado 23 de julio. Entonces, el PP obtuvo 137 escaños, el PSOE se hizo con 121, Vox consiguió 33, Sumar se apuntó 31, ERC 7, Junts 7, EH Bildu 6, PNV 5, BNG 1, CC 1, y UPN 1. Así, el PP pasaría a tener 122 escaños, el PSOE crecería hasta los 169, mientras Vox y Sumar bajarían a los 28 y 13 respectivamente. 

No nos extrañan estos resultados. Sánchez lo da todo por España y por Begoña, mientras el PP se ha dedicado a denunciar ante la Junta Electoral Central (JEC) que el CIS haya realizado una encuesta rápida sobre la carta: "El Partido Popular denuncia la financiación ilegal que está empleando el PSOE para pedir a Pedro Sánchez que continúe en su cargo de presidente del Gobierno". 

Pero esta encuesta, pese a ser flash, ha dado para más. Solo el 20,9% de los españoles considera que la dimisión hubiera sido la decisión correcta, un 23,6 cree que la convocatoria de elecciones era el mejor camino y el 36,7 de los españoles apuesta porque Sánchez debería explicar lo sucedido y continuar al frente. 

Sobre si dar su apoyo al "gesto y la actitud del presidente Pedro Sánchez al hacer pública dicha carta", los españoles se dividen, un 44,6% de los encuestados no apoya, frente a un 43,1 que sí respalda el movimiento. Pero un 41,1% sostiene que Sánchez “tiene razón” y un 38,8 descarta sus argumentos.

Donde parece que los españoles lo tienen claro es sobre si si la investigación judicial contra Gómez “está justificada” o “solo es una manera de meterse con Pedro Sánchez e intentar hacerle daño”. El 48,2% cree que es una forma de acabar con el presidente, frente al 30 de los encuestados que ven motivo para la investigación. 

begoña

Los encuestados ven en Sánchez una persona que se esfuerza, porque el 52,8% respalda que “la vida política se está convirtiendo en algo muy duro e insoportable” y el 90,5% sostiene que no “está justificado el empleo de mentiras, insultos y ataques personales en el debate político, o deberían existir límites que no deberían traspasarse”, asumiendo que hay que poner límites. Así prepara Tezanos el próximo golpe de Sánchez contra la libertad de expresión y de prensa, es decir, su carrera para acabar con los medios díscolos. 

Y para rematar la jugada y que Sánchez tenga base y apoyo público para su asalto definitivo a la justicia, se plantean dos cuestiones. Primera, si la justicia en España actúa siempre de forma imparcial o en ocasiones "se ve influida por otros poderes políticos o económicos", a lo que una gran mayoría, el 82,6 por ciento contesta afirmativamente, además, en la segunda, 81,4 por ciento, creen que se debe reformar la justicia del país.