Preguntado el Banco de España sobre el papel que juega La Caixa en la OPA de Gas Natural contra Endesa, el supervisor financiero pone de manifiesto que no tiene comentario ni valoración alguna que hacer al respecto, ya que su función se basa en hacer cumplir escrupulosamente lo que marca la legislación en esta materia.

En relación con las participaciones industriales de las cajas de ahorros, el Banco de España ha dejado claro en reiteradas ocasiones que, en la medida en que éstas tengan vocación de permanencia, constituyen un riesgo especial y que han de ser tratadas con particular prudencia. Ya en abril de 2001, el Gobernador Jaime Caruana señaló ante la Asamblea de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) que este tipo de inversiones industriales permanentes generan responsabilidades adicionales y, si sobrepasan determinados límites o alcanzan proporciones relativas importantes, pueden ser extrañas a su naturaleza y objetivos, que se caracteriza por la vocación social y regional. Caruana solicitó entonces a las cajas, y lo ha vuelto a hacer en posteriores intervenciones públicas, que actuaran con automoderación en este terreno.

Por otra parte, en junio del presente año y en el Foro Estratégico de las Cajas de Ahorro sobre Responsabilidad Social Corporativa, el Gobernador puso de relieve la necesidad de que las cajas evitaran interferencias que lleven a confundir los fines sociales con los objetivos de política pública, solicitando que se establezcan contrapesos, dificulten personalismos e interferencias externas y faciliten la definición de estrategias claras acordes con su naturaleza e incentiven la gestión profesional y transparente.

No obstante, el Banco de España considera que no existe ninguna normativa legal específica que respalde una intervención directa en este ámbito por parte del supervisor bancario, el cual debe actuar siempre dentro del más escrupuloso respeto de la legislación vigente en cada momento. Su capacidad se limita en cierta forma a ejercer la debida persuasión moral en busca del mejor gobierno de las entidades, como corresponde a quien tiene el mandato de preservar la estabilidad del conjunto del sistema financiero.