Según los datos del Banco de España, el Ayuntamiento de Málaga es el quinto con más deuda bancaria de España. En la actualidad la cifra asciende a la friolera cantidad de 738 millones de Euros.

 

Con los 100 asesores y cargos de confianza que tiene el primer edil de Málaga, con tantas personas que tiene a su lado, pensarán ustedes que es muy difícil que se pueda equivocar y que tendría que ir todo a las mil maravillas. Pues no, ya han visto cómo están las cuentas.

Es muy difícil pensar que con la que está cayendo en España, algunas personas no se hayan dado todavía cuenta de la situación en la que estamos.

El Alcalde del PP en el Ayuntamiento de Málaga, Francisco de la Torre, en el último pleno no ha querido ni congelarles ni rebajarles el sueldo a sus 100 asesores y personal de confianza, alegando que lo hace por motivos de humanidad. 

Alcalde de Málaga: ¿Razones de humanidad? ¿No se estará usted riendo de nosotros? ¿De qué humanidad nos habla? Estas declaraciones suyas, si es que no es usted un insensato, debería de habérselas ahorrado, pues han herido a muchos y escandalizado a otros.  

Aclaro a los señores lectores, que la media de lo que ganan estos asesores y cargos de confianza, supera los 10.000 Euros mensuales. Muy humanitario él.

No hace falta que les recuerde a ustedes las penurias económicas por las que estamos atravesando todos, y muy especialmente los más pobres, débiles y necesitados. Esto, es el pan nuestro de cada día en casi todas las ciudades de España. Ustedes me dirán, y con toda la razón del mundo, que esto, está pasando en muchas, muchísimas ciudades españolas. El caso de la deuda del Ayuntamiento de Málaga, gobernado por el PP, lo he querido poner de ejemplo.

Lo peor de todo esto ya no es que estas cosas ocurran en ayuntamientos socialistas. Lo peor y más doloroso es que lo hagan con toda la naturalidad del mundo personas de nuestro partido.

Ni los ciudadanos de Málaga ni los de otras ciudades españolas somos merecedores de tener en cargos institucionales a este tipo de personas que se hacen llamar políticos, y que encima administran pésimamente nuestros dineros, llevándonos a todos a la bancarrota.

Comprendo que una persona que ostente un cargo de alta responsabilidad pueda tener una, dos, tres personas para que en un momento dado le puedan asesorar. Pero cuando se juega con el dinero de los demás, multiplicar ese número de cargos por tres, por cinco o por diez, eso significa para mí y para el común de los humanos, que esa persona es: Un abusón, un caradura que le toma el pelo a los ciudadanos que le pagamos, o un inepto. O todo al mismo tiempo. Elijan ustedes.

Muchos ciudadanos podrían pensar: ¿para qué necesitamos votar en unas elecciones a esta persona? Votemos a su asesor, o a lo mejor hasta lo encontramos en el mercado de trabajo más preparado y a mitad de precio.

¿Cuándo un alcalde o cualquier cargo público ha tenido la seriedad y la vergüenza de dirigirse a los ciudadanos que le han votado y le pagamos, para preguntarnos qué sueldo le queremos o podemos pagar?

En ninguna de las elecciones que hemos tenido, los cargos electos nos han avisado de que les tenemos que votar a ellos e incluir en el lote a su grupo de asesores y cargos de confianza.

Al Partido Popular actual se lo están cargando un gran grupo de iluminados dirigentes que están permitiendo que unos aprovechados sin escrúpulos tomen posesión de los cargos orgánicos e institucionales. Muchos de estos, hace tiempo que dejaron olvidados nuestros principios y valores.

Si en los congresos nacionales, regionales, provinciales, locales, los comités ejecutivos y las juntas directivas de nuestro partido, fueran todos los cargos elegidos democráticamente por los militantes y no por compromisarios impuestos a dedo por el Sr. Arenas de turno, estas cosas no sucederían.

Esto no puede continuar así durante mucho tiempo más. No podemos permitirlo. Las cosas pueden y deben cambiar. Por causa de nuestra desidia general, consentimiento y acatamiento, nuestra democracia se puede ir al garete. No esperen ni se crean, que esto se lo van a solucionar ellos. Nosotros, en Democracia y Libertad en el PP, empezamos hace dos años a movilizarnos y a trabajar para que esto cambie. Tenemos ilusión y esperanzas de poder tener una España que sea el modelo en el que se tengan que fijar todas las naciones del mundo. Nos gustaría poder contar con su ayuda.

Democracia y Libertad en el PP