Estaba la buena de Pepa Bueno contándonos las buenas noticias en el telediario del pasado jueves, en la RTVE convertida en un Patio de monipodio, eso sí, progresista.

Nos contaba las buenas noticias sobre la reducción del número de mujeres muertas, es decir, asesinadas, a manos de sus parejas y todos nos congratulemos con ella. Pero el problema es que con eso no se crea polémica ni se dicta doctrina, porque todos estamos de acuerdo en condenar la muerte de mujeres -incluso de varones- a manos de sus parejas. Por tanto, faltaba la guinda de género, o sea, la chorrada feminista. "La mala noticia -nos cuenta Pepa- es que ha aumentado el número de mujeres que se retracta de su acusación", es decir, que se vuelve atrás a la hora de llevar ante los tribunales a sus parejas.

¡Cómo es posible! ¿Es que no se dan cuenta que eso sería una buena noticia?

Para entendernos, si una mujer se echa atrás en la demanda contra su pareja puede ser por dos razones: porque la demanda era falsa -la ley Zapatero, apoyada por el PP, sobre violencia de género, ha generado un alud de demandas falsas perpetradas por desaprensivas contra sus parejas, generalmente para obtener un divorcio rápido y, a ser posible, meter al maromo en la trena. Y también puede ser que, en efecto, haya violencia machista -aunque es mucho más grave la violencia feminista, sobre todo el aborto- pero que, afortunadamente, se haya impuesto la razón y la pareja se haya reconciliado.

¿Puede permitirse tamaño desafuero? ¡Nunca jamás! Eso es una "mala noticia" para los chicos, y chicas, de progres.

Tampoco hay que extrañarse. A fin de cuentas, la ideología de género no es más que guerra de géneros, la guerra más estúpida de todos.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com