- A ellos hay que añadir una religiosa y dos laicos, que hacen un total de 22 agentes pastorales, el doble que el año anterior.
- Por quinto año consecutivo, el número más elevado de agentes pastorales asesinados se ha registrado en Hispanoamérica, con Colombia en el primer puesto de la lista.
- La mayoría de ellos fueron asesinados como resultado de intentos de robo o hurto.
- Como ha subrayado el Santo Padre Francisco, "en dos mil años son una multitud inmensa los hombres y las mujeres que sacrificaron la vida por permanecer fieles a Jesucristo y a su Evangelio".
En el 2013 han muerto de forma violenta 19 sacerdotes, 1 religiosa, 2 laicos. Según la repartición continental, en América han sido asesinados 15 sacerdotes (7 en Colombia; 4 en México; 1 en Brasil; 1 en Venezuela; 1 en Panamá; 1 en Haití); en África han sido asesinados un sacerdote en Tanzania, 1 religiosa en Madagascar, 1 laica en Nigeria; en Asia han sido asesinados 1 sacerdote en India y 1 en Siria; 1 laico en las Filipinas; en Europa ha sido asesinado 1 sacerdote en Italia.
Fides observa que la mayoría de ellos fueron asesinados como resultado de intentos de robo o hurto, y en algunos casos agredidos con ferocidad, una señal del clima de decadencia moral, de pobreza económica y cultural, que genera violencia y desprecio por la vida humana. Todos vivían en estos contextos humanos y sociales, realizaban la misión de proclamar el mensaje del Evangelio sin hacer actos sensacionales, sino dando testimonio de su fe en la humildad de la vida cotidiana.
Como sucede desde hace algún tiempo, la lista de la agencia no trata sólo de los misioneros ad gentes en sentido estricto, sino de todos los agentes pastorales asesinados de forma violenta. No se utiliza el término "mártires", sino en su sentido etimológico de "testigos" para no entrar en el juicio que la Iglesia podrá dar a algunos de ellos, y también por las pocas noticias que se consigue recoger sobre su vida y las circunstancias de la muerte.
A todo ello, Fides añade que sigue causando gran preocupación el destino de muchos otros agentes pastorales secuestrado o desaparecidos, de los cuales no ha habido noticias, como los tres sacerdotes congoleños Agustinos de la Asunción, secuestrados en Kivu del Norte, en la República Democrática del Congo en octubre de 2012, y de un sacerdote colombiano desaparecido desde hace meses.
Mientras que el terrible conflicto que ensangrienta desde hace tres años a Siria no perdona a los cristianos: hace mucho tiempo no hay ninguna noticia del jesuita italiano Paolo Dall'Oglio, o de los dos obispos metropolitanos de Aleppo -el greco ortodoxo Boulos al-Yazigi- y el sirio ortodoxo Mar Gregorios Yohanna Ibrahim, de las religiosas ortodoxas del monasterio de Santa Tecla.
Como ha subrayado el Santo Padre Francisco, "en dos mil años son una multitud inmensa los hombres y las mujeres que sacrificaron la vida por permanecer fieles a Jesucristo y a su Evangelio" (Ángelus del 23 de junio de 2013).
A las listas provisionales elaborados anualmente por la Agencia Fides, de hecho, siempre hay que añadir la larga lista de muchos, de los cuales tal vez nunca se tendrá noticia o de quienes no se sabe el nombre, que en todos los rincones del planeta sufren y pagan con la vida su fe: "pensemos en los muchos hermanos y hermanas cristianos que sufren persecuciones a causa de su fe. Son muchos. Tal vez muchos más que en los primeros siglos. Jesús está con ellos.
También nosotros estamos unidos a ellos con nuestra oración y nuestro afecto; tenemos admiración por su valentía y su testimonio. Son nuestros hermanos y hermanas, que en muchas partes del mundo sufren a causa de ser fieles a Jesucristo " (Papa Francisco, Ángelus del 17 noviembre 2013).
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com