Los estudios Pixar nos tienen tan acostumbrados a ser geniales incluso en sus secuelas (el mejor ejemplo es Toy Story 3) que cuando hacen un producto como Cars 2, con el único objetivo de entretener, nos dejan algo decepcionados…
En esta nueva aventura Rayo McQueen y su amigo, la grúa Mate, viven una gran aventura cuando Rayo se apunta en el Campeonato Mundial para determinar cuál es el coche más rápido del mundo. Pero, en ese lance, también se dirime el lanzamiento de un nuevo combustible que puede cambiar el actual panorama automovilístico y una intriga de espionaje internacional…
Cars 2 es, sobre todo, una agilísima película de acción, de carreras, muy bien rodada (hay cientos de planos de las carreras) en la que Pixar se luce con una animación fantástica. Por el contrario su argumento es muy simple, parece poco trabajado y no cuenta con mensajes ni demasiado profundos ni emotivos como otras películas de estos conocidos estudios. En ese contexto la película hace guiños constantemente al espectador con los nuevos personajes. Así, además de la breve mención e imagen de los coches de Fernando Alonso y Louis Hamilton (que se han doblado a ellos mismos); el agente Fin McMissile resulta un claro homenaje al agente 007, James Bond. Por el contrario, lo más cargante de esta película de animación se encuentra en la excesiva presencia en el desarrollo de la grúa Mate que más que simpática es algo bobalicona.
Concretando: Cars 2 entretiene pero nunca encandila.
Ah, muy importante, lo que merece la pena, y es muy divertido, es el cortometraje que precede a la película con los personajes de Toy Story. Lleguen pronto a la sala de cine porque es de más calidad y tiene más ingenio que el largometraje de Cars 2 que se emite a continuación.
Para: Los que quieran ver una peli infantil de acción entretenida pero sin la magia habitual con la que cuentan las realizadas por estos estudios Pixar
