En Argentina, el gobierno de Mauricio Macri pactó un crédito de 50.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para atenuar la escasez de divisas y fortalecer la economía. Eso sí: a cambio de austeridad, recoge Swissinfo de AFP.

En concreto, a cambio del préstamo, Argentina debe bajar su meta de déficit fiscal primario, antes del pago de la deuda, de 3,2% a 2,7% del PIB en 2018 y del 1,3 por ciento del PIB el año próximo. El objetivo paulatino es llegar a un superávit fiscal de 0,5% del PIB en 2021.

La deuda pública en Argentina pasó de representar el 42% del PIB en 2015, al asumir Macri, a un 53% a comienzos de año y en curva ascendente.

La inflación en 2017 fue de 25%, pero el Banco Central reveló esta semana que se estima para este año un costo de vida minorista de 27%.

"Para reducir la inflación el plan refuerza el esquema de metas con tipo de cambio flotante y fortalecimiento de la autonomía del Banco Central. Las metas de inflación son de 17% para 2019, 13% para 2020 y 9% para 2021", afirmó Dujovne. "Habrá un desembolso inmediato por 15.000 millones de dólares", precisó.

"Acudimos al FMI para evitar una crisis", admitió el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, al anunciar en Buenos Aires el acuerdo 'Stand-By' de 36 meses, que aún debe recibir la luz verde del directorio del Fondo.

"Las autoridades (argentinas) se han comprometido en mantener un piso para el gasto en asistencia social", indicó por su parte Lagarde

En Washington, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, dijo en un comunicado que "se trata de un plan concebido e instrumentado por el gobierno argentino" que busca dar "respaldo financiero" a Argentina con el fin de apuntalar "la confianza del mercado”.

Macri anunció el 8 de mayo que había solicitado un préstamo del FMI, en medio de una corrida cambiaria que depreció en más de 20% el peso y llevó elevar a 40% la tasa de interés y a inyectar al mercado unos 11.000 millones de dólares de las reservas del Banco Central.

"Las autoridades (argentinas) se han comprometido en mantener un piso para el gasto en asistencia social", indicó por su parte Lagarde. Dujovne dijo que este objetivo es original dentro de los planes que se acuerdan con el FMI.

La economía argentina creció un 2,8% en 2017 pero empezó a desacelerarse el crecimiento después de la devaluación de este año.