La Reserva Federal norteamericana, tras al parecer una dura reunión de su Comité de Dirección, ha decidido mantener el precio del dinero en Estados Unidos por encima del 4% (2% en Eurolandia).
Donald Trump está que trina, porque como muy empresario y poco financiero, considera que el dinero debe estar barato y a disposición de cualquiera que pretenda montar una empresa, al tiempo que, como buen estadounidense, pretende aprovecharse de la primacía de su país en el mundo para seguir creciendo con una moneda débil y un déficit comercial importante -y ahora con aranceles- a costa del resto del mundo: América primero.
Ahora bien, el presidente de la Reserva Federal, el banco central de USA, es nombrado por el por el presidente de los Estados Unidos pero, una vez nombrado es independiente de quien le nombra.
Así que Jerome Powell ha decidido enfrentarse a Donald Trump y mantener los tipos por encima del 4%, al doble que en Europa.
Las leyes pueden gustar más o menos pero se suponen que mientras no vulneren los principios morales básicos, es decir, mientras sean leyes justas, hay que cumplirlas hasta que no se cambien. Además, en ese caso, Powell ha dejado clara la razón de fondo por la que mantiene tipos y se enfrenta a Trump: no es mi función proporciona "financiación barata" al Gobierno. Aprende, Christine Lagarde.
En otras palabras, don Jerome ve peligro de inflación (y eso también resulta discutible pero vuelvo a apelar a su independencia) pero, sobre todo, el presidente de la Reserva Federal está luchando contra la práctica más habitual de todos los políticos derrochadores (no muchos, tan sólo el 99% de los actuales): gobernar a costa de endeudar a la próxima generación.
Si los tipos están bajos, el gobernante derrochador podrá emitir más deuda pública -la deuda actual de EEUU es astronómica- a precios más bajos. Con ello crece el gobierno y merma la propiedad privada, que en teoría, es lo que defiende Donald Trump.
Por cierto, en esta tesitura, promocionar el Bitcoin, que no es otra cosa que dotarle de poder liquidatorio de deudas, es como acercar el fuego a la gasolina. Porque el BCE o la Reserva federal puede ponernos más difícil emprender manteniendo alto el precio de dinero... pero, ojo, se trata de un dinero con una referencia: la del BCE o la de la Reserva Federal. La única referencia del bitcoin y del resto de las criptomonedas es una fórmula matemática... que no acudirá en ayuda de ningún poseedor de criptos en caso de desastre.
El día en que la deuda pública norteamericana se sustente en bitcoin, ¡echaos a temblar! queridos amigos del mundo mundial.
