
2024 no fue un buen año para la mayoría de las petroleras, debido al abaratamiento del petróleo y del gas, así como a los menores márgenes de refino. Así se ha visto en la española Repsol, la lusa Galp, la británica BP, la anglo-neerlandesa Shell, las estadounidenses Chevron y ExxonMobil, la francesa TotalEnergies o la noruega Equinor, mientras Moeve (antes Cepsa, que está controlada por el fondo Mubadala) ha logrado dejar números rojos. La italiana Eni, la brasileña Petrobras y la mexicana Pemex se han comportado como la mayoría: las dos primeras han visto hundirse su beneficio y la mexicana ha vuelto a pérdidas.
Eni ha reducido sus ventas un 5,2%, a 88.797 millones de euros. Por su parte, el beneficio operativo ha bajado un 36%, a 5.248 millones, con caídas en todos sus negocios: Exploración y Producción (también denominado upstream en el argot del sector); Gas, GNL y Energía; Enilive -su filial de transformación de la movilidad, de la que el fondo KKR posee un 30% (25% comprado en 2024 y un 5% más este año)-; Plenitude -filial que vende luz y gas, y produce energía renovable, y en la que ha entrado el fondo EIP con un 10%-; Refino y Química. El beneficio neto ha caído un 44,6%, a 2.641 millones, por la evolución de los precios del crudo y del gas, así como el impacto de unas amortizaciones de activos por 2.315 millones; y el beneficio neto ajustado ha caído un 37%, pasando de 8.322 millones a 5.264 millones.
La petrolera, controlada en un 28,5% por Cassa Depositi e Prestiti (CDP) y en un 1,99% por el Tesoro italiano, ha anunciado un memorando de entendimiento con Petronas, la empresa estatal malaya de petróleo y gas, para crear una sociedad conjunta que supervise los activos upstream en Indonesia y Malasia. En 2024, ha destinado 8.800 millones a capex orgánico y la deuda neta ha pasado de 9.600 millones a 12.200 millones. “2024 fue un año excepcional de crecimiento y creación de valor para Eni, respaldado por nuestro marco financiero y nuestra disciplina de costes”, ha señalado el CEO, Claudio Descalzi.
La petrolera italiana, controlada en un 28,5% por Cassa Depositi e Prestiti (CDP) y en un 1,99% por el Tesoro italiano, ha anunciado un memorando de entendimiento con Petronas, la empresa estatal malaya de petróleo y gas, para crear una sociedad conjunta que supervise los activos 'upstream' en Indonesia y Malasia
Petrobras ha visto descender sus ventas un 10,7%, a 87.232 millones de euros, con menores cifras en todos sus negocios: explotación y producción (-9,5%); refino, transporte y comercialización (-10,1%); y gas y energías bajas en carbono (-14,3%). Los costes operativos de la petrolera controlada por el Estado brasileño han crecido un 19,8%, hasta 18.222 millones.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado ha bajado un 22,9%; a 38.550 millones. El beneficio neto se ha hundido un 69,7%, a 7.183 millones, por el efecto contable de la variación del tipo de cambio de las deudas con las filiales en el exterior, el contexto negativo de precios de hidrocarburos que ha notado el sector y las pérdidas del cuarto trimestre. Además, las inversiones han ascendido a 15.841 millones (+31%) y han superado las previsiones, al tiempo que la deuda neta ha crecido un 16,9%, a 49.849 millones. Petrobras obtiene menos ingresos y beneficio, pero su director financiero, Fernando Melgarejo, presume de “la salud financiera de la empresa y la calidad de sus activos, los cuales operan de manera rentable, generando recursos para realizar inversiones, remunerar a los accionistas y cumplir con todas sus obligaciones”.
Petróleos Mexicanos (Pemex) tampoco ha tenido un buen 2024. Los ingresos han disminuido un 2,4%, por las menores exportaciones petroleras y la menor producción de hidrocarburos (-6,2%). El costo de las ventas se ha incrementado un 4,4% debido a los gastos de mantenimiento. La petrolera estatal mexicana ha vuelto a pérdidas, que se han situado en unos 29.120 millones de euros, lejos del beneficio de 2023, debido a la caída de la producción de hidrocarburos y a la depreciación del peso mexicano frente al dólar. De estos números rojos, unos 8.890 millones han correspondido al cuarto trimestre.
Pemex ha vuelto a pérdidas, que se han situado en unos 29.120 millones de euros, lejos del beneficio de 2023, debido a la caída de la producción de hidrocarburos y a la depreciación del peso mexicano frente al dólar
Con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México, se produjo un cambio en la cúpula de Pemex: a finales del pasado agosto, Víctor Rodríguez Padilla, un antiguo compañero universitario, fue elegido para relevar a Octavio Romero el 1 de octubre. A pesar de menos ingresos y de pérdidas, la deuda financiera ha descendido un 10,3%, a 93.465 millones, por los apoyos del Gobierno mexicano.