Ryanair ha recibido una de cal y otra de arena en los resultados de su último ejercicio fiscal (abril de 2024 a marzo de 2025). Y es que ha logrado récord de pasajeros al bajar precios (-7%) y más ingresos, pero su beneficio se ha reducido un 16%.

El grupo aéreo low cost que dirige el polémico Michael O’Leary ha transportado el récord de 200,2 millones de pasajeros, lo que supone un 9% más que en el anterior ejercicio fiscal, gracias a las menores tarifas. Y todo ello, pese a los retrasos que sufre en las entregas de aviones de Boeing y que llevó a O’Leary a amenazar a este último y también a Airbus con comprar al chino Corporación de Aviones Comerciales de China (Comac)... si su avión C919 es más barato y es homologado en Europa. Además, insiste en maltratar a sus viajeros... ahora les cobrará 100 euros si pierden un vuelo y tienen que ser recolocados en otro. 

El récord de pasajeros ha repercutido en los ingresos del grupo aéreo (el cual incluye a la aerolínea que le da nombre, así como Malta Air, Buzz y Lauda Europe), que han aumentado un 4%, a 13.948,5 millones de euros. Por su parte, los costes operativos han crecido un 4%, a 12.390,5 millones. Así, el beneficio operativo ha caído un 24%, a 1.558 millones; y teniendo en cuenta los mayores gastos financieros y un menor impacto positivo del tipo de cambio, el beneficio neto se ha reducido un 16%, situándose en 1.611,6 millones, frente a los 1.917 millones del ejercicio fiscal anterior (cuando se aprovechó de la subida de precios de los billetes y el mayor cobro por equipaje). 

Los mayores costes operativos lastran el beneficio operativo (-24%) y los mayores gastos financieros y el menor impacto positivo del tipo de cambio se notan en el beneficio neto (-16%)

El mercado no ha reaccionado bien a los resultados del último ejercicio ni al anuncio de un dividendocomplementario ni a la aprobación de una nueva recompra de acciones por valor de 750 millones: la cotización ha descendido un 0,79%. Parece que los inversores ya daban por sentados dichos anuncios y les inquieta que el resultado del presente ejercicio esté “muy expuesto a acontecimientos externos adversos” por el riesgo de los aranceles, “perturbaciones macroeconómicas y la escalada del conflicto en Ucrania y Oriente Próximo”. Además, no hay que olvidar que la cotización acumula ya una revalorización del 16,5% este año.

Claro que últimamente el grupo Ryanair está teniendo más protagonismo por sus polémicas que por sus números, y no tuvo reparos en burlarse del ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, PabloBustinduy al disfrazarle de payaso y llamarle “loco comunista”. El origen del conflicto está en la multa que su Departamento impuso a cinco aerolíneas low cost(Ryanair, Vueling, easyJet, Norwegian y Volotea) por 179 millones por cobrar el equipaje de mano y otras “prácticas abusivas”.... y mientras Bruselas investiga la sanción, Ryanair ya tiene que devolver recargos por dicho cobro. De hecho, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vitigudino (Salamanca) le ha condenado a reembolsar 147 euros a una pasajera -que a su vez es socia de Facua- por el dinero que tuvo que pagar para volar con el equipaje en cabina en cinco vuelos entre los años 2019 y 2024.

Su maltrato a los pasajeros no le impide seguir logrando récords. Además, el grupo aéreo low cost se ha vuelto más inclusivo: ha introducido la categoría “Mixto” al comprar un billete. Claro que tampoco trata demasiado bien a los empleados: ahora pide que sus tripulantes de cabina devuelvan las subidas salariales que aplicó el pasado octubre, pues la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional anuló la mesa negociadora que acordó el I Convenio Colectivo de tripulantes de cabina de Ryanair.

Y en las redes sociales, se pueden ver algunas quejas aludiendo al maltrato presente y futuro de Ryanair, y las irónicas respuestas de la aerolínea. Pasen y vean.