• El ministro de Hacienda pretende multar a las empresas, aunque sus maniobras no sean delito, con entre el 50% y el 150% de la cantidad cuestionada.
  • Un aspecto que podría no ser aceptado por el Consejo de Estado, el cual ya prepara un informe sobre dicha reforma legislativa.
  • El Anteproyecto de Ley se estudiará previsiblemente en el próximo Consejo de Ministros y se podría aprobar en mayo.  
  • El titular de las arcas públicas, empeñado en luchar contra el fraude, reforzará este objetivo publicando, en vísperas de las elecciones generales, la famosa lista de morosos.
  • Un guiño para los inspectores: el plazo de inspección se ampliará de los 12 meses actuales y prorrogables a 24 hasta los 18 y 27 meses, respectivamente.

En estos últimos meses de legislatura, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro (en la imagen), no está dispuesto a hacer la vista gorda, sino que sobre todo busca castigar las prácticas de ingeniería fiscal que llevan a cabo las multinacionales. Para ello quiere contar con la reforma de la Ley General Tributaria como instrumento, pero antes debe ser aprobada.

Concretamente, Montoro pretende multar a las empresas que lleven a cabo este tipo de maniobras, aunque estas no sean consideradas delito, y poner así punto y final a su caradura y comportamiento no ejemplar. Por ello, las compañías podrían afrontar sanciones de entre el 50% y el 150% de la cantidad cuestionada. Hacienda ansía este aspecto, que también cuenta con el beneplácito de la Agencia Tributaria (AEAT), pero podría no ser aceptado por el Consejo de Estado, que ya prepara un informe sobre dicha reforma legislativa.

El Anteproyecto de Ley de Modificación Parcial de la Ley 58/2003 General Tributaria se estudiará previsiblemente en el Consejo de Ministros del próximo viernes y, si todo va bien, se podría aprobar en mayo. Así, Montoro podría disfrutar de su puesta en marcha y de tener su batuta unos cuantos meses, al menos, hasta que la legislatura llegue a su fin.

Pero las multas a las multinacionales no son la única medida de la reforma de la Ley General Tributaria. Como saben, el titular de las arcas públicas está empeñado en luchar contra el fraude. Precisamente, para reforzar este objetivo, se publicará, en otoño y en vísperas de las elecciones generales, la famosa lista de morosos.

En ella, se incluirá a los deudores, tanto personas físicas como jurídicas, que a 31 de julio de este año deban más de un millón de euros a Hacienda. Pero claro, estos morosos también contarán con una cierta deferencia, pues serán avisados antes de que se publique la lista y podrán salir de la misma si pagan su deuda.

Otra de las medidas de la reforma lanza un guiño a los inspectores, ya que se ampliará el plazo de inspección, pues se habían quejado de que no tenían tiempo suficiente para analizar todas las operaciones de una gran compañía. En concreto, se pasará de los 12 meses actuales, que son prorrogables a 24, hasta los 18 y 27 meses, respectivamente.

Cristina Martín

cristina@hispanidad.com