El presidente de Francia Emmanuel Macron pronunció un importante e inédito discurso dirigido a los católicos y que le ha granjeado enormes críticas de distintos partidos políticos, que censuran que valorase la aportación que la Iglesia ha hecho a Francia, recoge Religión en Libertad.

En su intervención, Macron destacó el ejemplo del gendarme católico Arnaud Beltrame, asesinado por yihadistas tras intercambiarse con una rehén. “Cuando llega la hora de mayor intensidad, la parte del ciudadano y la parte del católico arden en una misma llama”, dijo el presidente.

Igualmente, el mandatario francés aseguró que “los vínculos entre la Iglesia y el Estado están dañados y depende de ustedes y de mí arreglarlo” mientras reconocía que “Francia ha sido fortificada por el compromiso de los católicos”.

El presidente francés puso el ejemplo del gendarme católico Arnaud Beltrame, asesinado por yihadistas tras intercambiarse con una rehén.

Además, Macron pidió que los católicos aporten tres dones a Francia: “El don de vuestra sabiduría, el de vuestro compromiso y el de vuestra libertad”. “La savia católica debe contribuir, una y otra vez, al funcionamiento de nuestra nación”, insistió.

Pero además, el presidente dijo algo que ha levantado ampollas al afirmar que “la laicidad no tiene la función de desarraigar de nuestras sociedades la espiritualidad que nutre a tantos de nuestros conciudadanos”.

Y por ello añadió que “en este momento de gran fragilidad social, considero que es mi responsabilidad no permitir que se vea erosionada la confianza de los católicos en política”.

“El compromiso de los católicos es vital y ejemplar para Francia. Pero he venido a pediros más. Pido a los católicos que se comprometan políticamente. Vuestra fe es una parte del compromiso que necesita nuestra política”, llegó a afirmar.

¿Se imaginan a Rajoy, Sánchez, Rivera o Iglesias pronunciando un discurso así en España?