• El aumento de las ventas, gracias a las nuevas adquisiciones (El Árbol o Eroski), es insuficiente para retomar el crecimiento.
  • La cadena de distribución sufre en las dos orillas del Atlántico: en España, por la dura competencia, y en Brasil, en plena crisis.
  • Con todo, ya tiene el 9% de cuota de mercado y ha acortado distancias con Mercadona (líder, con el 22,2%) o Carrefour (8,3%).
  • La estrategia pasa por el multiformato: La Plaza de Dia ya tiene 100 tiendas en su cinco primeros meses y genera 1.900 empleos.
La cadena de distribución DIA está en una encrucijada. No crece como esperaba, a pesar de su política de nuevos formatos, y sufre un deterioro de ingresos en las dos orillas en las que se concentra su actividad: España y Portugal, por un lado, y Brasil, su principal mercado, por el otro. Este viernes, la cadena que preside Ana María Llopis (en la imagen) ha informado que La Plaza de Dia ha alcanzado ya las 100 tiendas, cinco meses después de su lanzamiento, y que dan empleo a 1.900 personas. Supone cuantitativamente muy poco, pero es un paso más en su estrategia de nuevos formatos. En el caso de La Plaza para aumentar su oferta en productos frescos y perecederos. Además, la cadena, que contaba en 2014 con 4.781 establecimientos en España (1.646 de ellos en régimen de franquicia), ha inaugurado en los dos últimos meses otros siete establecimientos de Dia Market y Cada Dia (cuatro propios y tres en régimen de franquicia) y otros diez con Clarel. Ahora bien, las cosas no van como la cadena esperaba y los resultados publicados hasta ahora ponen en duda su capacidad de crecer en España para adaptarse a un cambio de ciclo. Y además, la empresa está penalizada también al otro lado del Atlántico, de donde provienen el 36% de sus ingresos, según el último diagnóstico de los analistas de Bekafinance. La desaceleración en Hispanoamérica se debe, fundamentalmente, a la menor inflación en Argentina y al deterioro económico en Brasil, directamente afectado por la crisis china y por la depreciación de su moneda, el real (con relación al euro ha perdido un 25,9% de su valor). Pero la preocupación se centra sobre todo en España -el grueso en la Península, muy encima en peso que Portugal-. Los dos países aportar un 64% de sus ingresos de la compañía, o sea la parte medular. Pero en España, según los analistas, es donde están las mayores dudas sobre su capacidad real de crecer (acumula once trimestres consecutivos en negativo) o de mejorar los márgenes, en parte gracias a la nueva estrategia multiformato de la marca. No obstante, dicho sea todo: la cadena ha aumentado sus ventas un 9,7% gracias a la integración de Schlecker (en 2013, con el lanzamiento de la marca Clarel), El Árbol (noviembre de 2014) y, desde mayo, las 144 tiendas adquiridas a Eroski. Al cierre del primer semestre, la región contribuyó al 65% de los ingresos del grupo, pero ese peso podría reducirse, según Bekafince, al 60% a partir de 2017 sino lleva a cabo nuevas adquisiciones. Con todo, gracias a su política de compras, DIA ha aumentado su cuota de mercado al 9% y con ello ha acortado las distancias con Mercadona (líder, con el 22,2%) o con Carrefour (8,3%). Y la cuota de mercado es clave para mejorar la capacidad de negociación con los proveedores Pero el apoyo que le han aportado las adquisiciones, como decía, es insuficiente para crecer como esperaba y sostener los márgenes. La competencia es muy fuerte y hay también una sospecha de cierta saturación de los formatos de la cadena. Rafael Esparza rafael@hispanidad.com