"Conquistaremos Estambul, la que el traidor Erdogan trata de entregar a los cruzados", dice ahora el Estado Islámico, que ha utilizado Turquía hasta ahora para colar a sus yihadistas en Siria. El Estado Islámico no había dicho nada hasta ahora contra Turquía, entre otras cosas por eso, porque no le estropeaban el itinerario o porque le compraban el petróleo de los yacimientos iraquíes. Y Erdogan (en la imagen) paralelamente, se tumbó a la bartola dejando que la bestia creciera para que el presidente sirio, Bachar Al Asad, cayera en desgracia. Y ahora se encuentra con la misma amenaza que contamina todo Oriente Próximo: el EI acusa a Erdogan de ser la encarnación del diablo y un traidor por dejar que los aviones yankees utilicen sus bases. Y, paralelamente, los yankees se han cansado también de los engaños del presidente turco, que ha hecho un flaco favor al combate contra el yihadismo con su política machacar a los kurdos de su país, indignando a los otros kurdos, los que pelean en Siria e Irak. Por eso han retirado sus misiles Patriot. Hispanidad redaccion@hispanidad.com