Sucedió en Córdoba. El portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, afirmó que al Obispo hay que ponerle un "bozal".
Pues mire usted, al Obispo lo que hay que hacerle es dejarle hablar, que los católicos - somos mayoría- queremos y necesitamos oírle. Se trataba de taparle la boca sobre la ideología de género, demoledora en terreno social y moral. ¿Cómo no iba a pronunciarse un Obispo sobre esta barbaridad Si el Pastor no defiende a su rebaño, ¿quién lo hará
Son los políticos los que no deben meterse a hacer ingeniería social, desbancando instituciones milenarias enraizadas en la naturaleza humana, como el matrimonio y la familia que de él derivan de modo natural y que tanto bien han hecho y hacen a todos. Ahora, cuando la crisis económica arrecia, motivada por la irresponsabilidad de políticos de turno, ¿acaso no es la familia y la Iglesia quienes ayudan a muchos a vivir
Los ideólogos del género quieren arrancarnos lo mejor que tenemos y lo que más valoramos: la familia sobre la base natural de la unión del hombre y de la mujer; para ello, dicen, que no se es hombre ni mujer sino que nosotros elegimos lo que queremos ser, y, a base de repetirlo y de poner bozales, nos lo quieren meter en la cabeza.
Gracias a los obispos valientes que velan por nosotros para que el lobo no se lleve a todas las ovejas.
Josefa Morales de Santiago
