
Según la víctima, estaba tomando algo en una terraza cuando un grupo de siete personas se acerca a él, le piden papel de fumar y como no tiene, éste les ofrece un cigarrillo y, en ese momento, le arrancan la cajetilla y uno de ellos le propina un brutal puñetazo. En este caso, según recoge Cuatro.com, el agredido nos confiesa también, que no ha recibido un buen trato por parte de los Mossos cuando fue a interponer la denuncia.
"Me hicieron como un corrillo y, sin yo verlo venir, uno de ellos me dio un puñetazo y me empezó a increpar", explicaba Juan, quien añadía: "Tengo seis puntos de sutura y el ojo ensangrentado".
Además, la víctima explicó que, tras sufrir la agresión, se subió al coche patrulla de los Mossos d’Esquadra para intentar localizar a los responsables. “Encontramos a uno y lo detuvieron”, relataba.
Sin embargo, así mismo denunciaba que, después de acudir al hospital para ser atendido por las heridas, volvió a la comisaría y vivió una situación que considera injusta por parte de los agentes. “Llegó la familia del chico que me había atacado y dijeron: ‘Venga, no pasa nada’. Yo comenté en voz alta: ‘Parece mentira que se tenga más empatía con los ladrones que con la víctima’, y el policía de guardia me respondió: "Tú no me vas a decir a mí cómo tengo que hacer mi trabajo".









