Jornada agotadora la de nuestro presidente: mañana comienza la cumbre de la OTAN, pero el martes 28 llegaban a Madrid muchas de las delegaciones que se darán cita estos días en Madrid, y Sánchez ha ejercido para aquello para lo que nació, ser el líder de todos, todas y todes. Pedro ya no convence en España, las encuestas le auguran un futuro negro en Moncloa, cada vez le cuesta más sacar adelante acuerdos con la parte podemita de su Gobierno, y justo en este momento, en el que todo parece ir mal, Pedro se da un baño de masas, al que está poco acostumbrado, y llegan a España los grandes líderes progres. Y es que estamos ante una cumbre "histórica", adjetivo favorito del sanchismo, y Pedro Sánchez, a la búsqueda de un sitio en el Nuevo Orden Mundial (NOM), se ha reunido con todos, y, durante estos días, les agasajará, es decir, les peletoará.

Pedro ya se ha reunido con varios empresarios buscando su sitio en el NOM, y ahora es el turno de hacerlo con líderes políticos. 

Atención a la agenda del presidente, no queda un hueco libre, lo que les decía, Pedro acaba exhausto:

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Desde las 9 de la mañana trabajando, nuestro presidente,. Primero ha recibido al primer ministro de Australia, Anthony Albanese, al que le ha propuesto que, antes de acabar el año, se forme una delegación empresarial al más alto nivel, que viajará a Australia para buscar inversión en España. Y es que España tiene un largo camino por recorrer y aprender de Australia, por ejemplo, el país es el campeón mundial de la muerte, el pasado mes legalizaba la eutanasia en todo el país

A las 10:30, reunión con la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern. Moncloa informa que ambos líderes lanzaron en 2021 la 'Asociación de Valores Globales', que busca defender un orden internacional basado en normas y que parte de valores compartidos como la democracia, el Estado de Derecho, la sostenibilidad, la diversidad, la igualdad de género, y los Derechos Humanos. Sánchez ha subrayado que esta Asociación servirá para "construir sociedades más inclusivas, economías más verdes y democracias más resilientes". Tufo de Nuevo Orden Mundial eso de Valores Globales.

Un par de horas después, Pedro recibe al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, con el que visitaba las instalaciones de la cumbre en IFEMA. Y en declaraciones posteriores, Sánchez pedía de nuevo, que la Alianza Atlántica defienda Ceuta y Melilla, Stoltenberg hacía como que no oía a Sánchez y no decía nada acerca de este tema. Suponemos que la protección es contra "las mafias", nuevo mantra del Gobierno, porque las relaciones con nuestros "amigos del sur" y con Mohamed VI, son inmejorables. En esta visita, Sánchez, también insiste en los valores globales, "las democracias se unen para defender la democracia, los valores de libertad, pluralidad política, respeto a los derechos humanos y defensa de un orden internacional basado en reglas".

Y llega el momento que Sánchez esperaba desde hace tiempo, ese que tiene marcado en su agenda en rojo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llega a España. En declaraciones posteriores, Sánchez, ha afirmado que ambos países son aliados, socios estratégicos y amigos: "Nos unen raíces históricas, una excelente colaboración en numerosos temas y compartimos la voluntad de promover los principios de la libertad, la democracia, los derechos humanos, la igualdad de género y el estado social y democrático de derecho". 

Sánchez ha hecho una defensa del orden internacional basado en reglas como apuesta frente a la violación del derecho internacional y el "ataque frontal a los valores compartidos que ha supuesto la invasión de Putin en Ucrania". Y de postre, Biden informa que desplegará dos nuevos destructores en la base de Rota. 

A las seis recibe a a la primera ministra de Islandia, Katrín Jakobsdóttir, para luego acabar en la cena de gala que SS.MM. los Reyes ofrecen a las delegaciones de jefes de Estado y de Gobierno en el Palacio Real. 

Sánchez usa como eje principal en todos sus encuentros de hoy las reglas, los nuevos valores globales, y echa la culpa a Putin, que quiere el nuevo orden internacional. Ya lo hemos dicho, el problema de la civilización actual no es Putin, es Biden. En resumen, el NOM pasa por Moncloa y Sánchez le rinde pleitesía, se siente como pez en el agua.