
Basílica de Nuestra Señora, allí se halla enclavado el templo español más emblemático del Corazón de Jesús, la Basílica-Santuario Nacional de la Gran Promesa, desde donde se difundió la devoción al Corazón de Cristo por toda la nación, América y Filipinas
Sr. Director:
Organizada por la Federación Nacional de la Divina Misericordia, con la estrecha colaboración del Arzobispado de Valladolid y del Santuario, tuvo lugar, en la ciudad del Pisuerga, durante los días 4 y 5 de octubre, un evento religioso de marcado relieve: el XVII Encuentro Nacional de la Divina Misericordia. De más de veinte ciudades españolas de diversas Comunidades autónomas (Canarias, Cataluña, País Vasco, Andalucía, Castilla la Mancha ...), llegaron a Valladolid, varios centenares de personas vinculadas a la Divina Misericordia. Venían con gran expectación: no podía ser menos, dado del lugar, y no se marcharon defraudadas. Valladolid es la ciudad del Sagrado Corazón, en donde se halla enclavado el templo español más emblemático del Corazón de Jesús, la Basílica-Santuario Nacional de la Gran Promesa, desde donde se difundió la devoción al Corazón de Cristo por toda la nación, América y Filipinas. Jesucristo se manifestó aquí, al joven jesuita Beato Francisco Bernardo de Hoyos (1711-1735), al modo como, en Francia, a Santa Margarita María de Alacoque. Jesucristo hizo al Beato Bernardo esta promesa: “Reinaré en España y con más veneración que en otras partes”.
Los actos comenzaron a las 15 horas del día 4 con un Viacrucis procesional, que recorrió varias calles del centro de la ciudad y estuvo presidido por el Consiliario de la Asociación pública de fieles “Sociedad Sagrado Corazón de la Divina Misericordia”, don Julio de Pablos, quien, a continuación, dirigió, en la Basílica, la Coronilla, alternando en el canto, con la solista Natalia Blanca. A continuación, una magnífica conferencia sobre “El Corazón de Jesús, Fuente de la Divina Misericordia”, impartida por don Alfonso del Río, sacerdote muy destacado en la diócesis de Getafe por su honda espiritualidad. La Santa Misa, presidida por el Rector de la Basílica, D. Jesús F. Lubiano, estuvo concelebrada con sacerdotes consiliarios de las asociaciones venidas al Encuentro. Finalizaron los actos de este día, con una preciosa y emotiva Vigilia de Oración. El Día 5, hubo otra conferencia; esta vez impartida por el sacerdote polaco don Gregorio Lonski, Fiscal del Tribunal Eclesiástico vallisoletano. A continuación, en la catedral, abarrotada de fieles, la Santa Misa, presidida por don Luis Arguello, Presidente de la CEE, en su Homilía, breve pero enjundiosa, el Arzobispo destacó la importancia de la Divina Misericordia, “esperanza del Mundo”. Tras el rezo de la Coronilla y de la Veneración de la reliquia de Santa Faustina Kowalska (1905-1938), la monja polaca Secretaria del Divino Corazón de Jesús, se celebró, en el Hotel Imperial, una comida fraterna con alto numero de participantes.









