Pero donde más se enreda el presidente es en Navarra. Dice que el tema lo veía claro "desde el principio", como dijo Blanco el sábado en Pamplona. ¿Por qué entonces marearon la perdiz con Nafarroa Bai? Pero además, ZP señala que no tiene problemas en "colaborar" con UPN, un partido al que ve "muy diferente" al PP. Un intento de generar más ruido en las relaciones entre UPN y PP, que explicarían por qué Sanz implantará Educación para la Ciudadanía este curso y por qué su consejería de Educación cede al proyecto de ‘euskaldunización' que habían cocinado previamente NaBai y PSN.
No obstante, Zapatero sugiere que la decisión de "colaborar" con UPN no ha sido "muy compartida ni muy integrada" en el PSN. Y eso a pesar de que la reunión del sábado de los socialistas navarros se aprobó con el 95% de los votos. Zapatero es consciente de que no se puede enseñar un caramelo para retirarlo después y de que en Navarra tiene una contingencia gorda. Un motín latente. Atentos.