• Las ventas de turismos crecen un 64,8% en la primera mitad de octubre ante el final del PIVE 3.
  • Los fabricantes coinciden: hay que abaratar los costes logísticos.
  • Para el Gobierno, queda pendiente una "fuerte reforma fiscal", la unidad de mercado, la ley de desindexación y la reforma energética.
  • Mientras, GM admite que el encarecimiento de la energía ha anulado los efectos de los recortes salariales.
  • El sector reclama ayudas indefinidas hasta que mejore la economía.

El sector del automóvil está cobrando cada vez más importancia en nuestro país. Así lo demuestran las declaraciones que el director de Comunicación de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), David Barrientos, ha realizado este miércoles en el primer Foro Anfac y Pwc: nuestro país producirá 2,4 millones de vehículos en 2014. Sin duda, una buena noticia. La previsión para 2013 es de 2,2 millones.

Sin embargo, el destino de la mayoría de esos vehículos está fuera de nuestras fronteras. Así, en 2014, el sector prevé vender unos 766.000 coches en España. Es decir, de los 2,4 millones se exportarán 1,6 millones. Un ejemplo: más del 90% de los coches que Opel fabrica en la planta de Zaragoza se venderán fuera de España.

Por eso, el director general de General Motors España, Antonio Cobo, ha afirmado que la situación del mercado en nuestro país no afecta a las ventas de la marca. Surge una pregunta: entonces, ¿por qué tanto empeño de las marcas en lograr ayudas públicas

Hay un aspecto en el que todos los fabricantes están de acuerdo: es necesario abaratar los costes logísticos, uno de los puntos débiles del sector. Y es que la logística supone el 10% del coste de fabricación de un vehículo en España. El tema no es baladí: transportar cada coche desde la fábrica al punto de venta encarece el precio del vehículo en unos 300 euros.

En este sentido, durante su intervención, la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha recordado el acuerdo firmado el pasado 18 de septiembre entre su ministerio, Adif y Anfac, con el objetivo de impulsar la llegada del ferrocarril a las fábricas y a los puertos.

Sin embargo, aún quedan muchas cosas por hacer. Concretamente, Álvaro Nadal, jefe de la Oficina Económica de La Moncloa, ha señalado que el Gobierno tiene pendiente una "fuerte reforma fiscal", la unidad de mercado, la Ley de Desindexación y la aprobación definitiva de la reforma energética.

Por cierto, Cobo ha admitido que el aumento de los costes energéticos de la planta de Figueruelas de los últimos tres años -han subido más de un 30%- han anulado los esfuerzos de la empresa y de los trabajadores para reducir los costes laborales.

Así las cosas, el sector reclama al Ejecutivo ayudas permanentes, al menos hasta que la situación económica mejore. Esas ayudas "no son un gasto, sino una inversión", sostiene el presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com