La cosa funciona así: los informativos de televisión generan alarma social. Y los políticos van detrás creando planes integrales y observatorios para calmar las ansias. Así que si la semana pasada, España entera se conmovió con las imágenes del chaval atormentado por sus compañeros de clase que se mofaban de él castigándole con un estuche, el viernes, el Consejo de Ministros aprobaba un Plan de Mejora de la Convivencia Escolar más gaseoso que real. Objetivo cumplido : apagado el incendio.
Aprovechando que el 5 de octubre es el Día Mundial del Docente, el gobierno aprovecha para reconocer su labor y mostrar todos su apoyo al profesorado. Se llama a todos, familias, sindicatos y administraciones educativas a reconocer su labor y se menciona vagamente la necesidad de que tengan condiciones laborales dignas con reconocimiento social y económico. O sea, palmadita en la espalda y a otra cosa, mariposa. Son los costes de la sociedad de la imagen.
Las actuaciones concretas del plan son las siguientes:
1) Impulsar el conocimiento de los factores que desencadenan la ruptura de la convivencia.
2) Mejorar la convivencia
3) Crear un foro de debate entre profesorado y administraciones educativas para conocernos mejor
4) Observatorio del estado de la Convivencia escolar y Previsión de Conflictos, premiar las buenas prácticas y facilitar información y formación a los especialistas.
5) Vincular al Defensor del Pueblo para que emita un informe específico sobre el estado de la cuestión.
Valoren Uds. si es humo o no.