El fallecimiento del progenitor de la familia Weston, que pronto se descubre se ha suicidado, reúne alrededor de su desequilibrada viuda, Violet, a sus tres hijas, a su hermana y a una asistenta india. En esa reunión familiar, con una Violet desatada por su adicción a todo tipo de pastillas, se destaparán las tensiones, los secretos y los rencores que anidan en esas mujeres…
Ningún personaje femenino ni masculino se salva en esta crítica destructiva escrita por el dramaturgo Tracy Letts, por cuya obra teatral ganó el Pulitzer, y cuyo único aliciente al trasladarla a la gran pantalla es contemplar el recital de buenas interpretaciones de su famoso reparto, encabezado por Meryl Street y Julia Roberts, ésta última injustamente vapuleada en algunas críticas.
Agosto la publicitan como una comedia ácida, con momentos de humor; sinceramente es difícil descubrirlos quizás porque la matriarca de esta familia, Violet Weston, autoritaria y egocéntrica, parece una versión a la americana de la Bernarda Alba, de García Lorca, a la que nadie se atrevería a calificar de modelo de socarronería…
Para: Sólo para los que les gusten los dramas donde todo es negrísimo