El sector del automóvil celebra que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, haya anunciado que les dará tres años para cumplir la obligación de reducir emisiones, en lugar de un año. Todo esto mientras en España exigen un nuevo PlanMoves y ayudasdirectas que estimulen la demanda.

Von der Leyen dará más detalles de su propuesta el próximo 5 de marzo. Por ahora, ha avanzado que los fabricantes de automóviles tendrán tres años para reducir un 15% sus emisiones de CO2 respecto a los niveles de 2021, algo que tenían que hacer para este año y que si no cumplían afrontaban el pago de multas. Desde Faconauto (la patronal de concesionarios oficiales) han señalado que esto “abre nuevas oportunidades para el automóvil en Europa” y permite que “opere al ritmo de sus posibilidades, sin renunciar a objetivos compartidos, pero evitando que el camino hacia ellos frente inversiones”. Además, Faconauto ha valorado positivamente que se haga referencia a la “neutralidad tecnológica” para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones en 2035.

En paralelo, se ha conocido que las ventas de turismos han subido un 8,4%, a 162.443 unidades, pero aún son un 10% menores a las cifras preCovid, según los datos difundidos por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). De estos, 10.241 han correspondido a las zonas afectadas por la trágica DANA. Toyota, Renault y Kia se mantienen en el podio de las marcas más vendidas, aunque la francesa ha adelantado a la surcoreana. Sólo en febrero, se han vendido 90.327 turismos, un 11% más; pero sin el efecto DANA, el aumento sería del 5,8%; y la marca más vendida en el segundo mes ha sido la china MG.

La china MG es la marca más vendida en febrero y en lo que va de año destacan los fuertes aumentos de Omoda (+1.278%, a 1.819 unidades), SWM (+923%, a 73) y BYD (+563%, a 2.183)

Entre el resto de marcas del gigante asiático que venden en nuestro país, que cada vez son más, han destacado los aumentos de Omoda (+1.278%, a 1.819 unidades), SWM (+923%, a 73) y BYD (+563%, a 2.183). Mientras las ventas de la estadounidense Tesla han caído un 43,9%.

Por su parte, las ventas de turismos electrificados (100% eléctricos e híbridos enchufables) se han disparado un 34,2%, a 23.267. Sólo en febrero, se han disparado un 38,9%, a 13.013 unidades, lo que supone el 14,4% del mercado, aunque la mayoría de estas matriculaciones son ventas realizadas a finales de 2024. En caso de los vehículos totales, las ventas de electrificados se han situado en 25.327 unidades (+35,9%) y suponen el 13% del mercado, y de las que 13.971 (+38,8%) han correspondido a febrero. 

Félix García, director de comunicación y marketing de Anfac, ha señalado que “los vehículos híbridos convencionales continúan siendo los líderes en ventas con el 44% mientras que el diésel ya sólo lo eligen el 6% de los compradores”. Desde Faconauto, su director de comunicación, RaúlMorales, ha explicado que en diciembre se dejaron de matricular muchos vehículos eléctricos para que contabilizaran en este año 2025 y de esa manera contribuir a compensar las emisiones medias de CO2 y evitar las multas previsibles si no se cumplían las emisiones. También ha referido que ha decaído el Plan Moves, pero “es esencial que el Gobierno publique cuanto antes esa renovación que ya está anunciada, con carácter retroactivo, pero hasta que no se publique el comprador y el sector no van a tener esa certidumbre”. Por su parte, Tania Puche, directora de comunicación de la Asociación de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), ha subrayado que “la falta de ayudas ha provocado ya una ralentización de los pedidos y sin planes en vigor la perspectiva es que se modere el crecimiento del canal de particulares, que ahora mismo tira de las matriculaciones. De ahí la necesidad de disipar con urgencia la incertidumbre que están provocando los continuos anuncios sin concretar por parte del Ejecutivo”. Además, ha apuntado que ante el ritmo de electrificación insufiente y un parque que no para de envejecer “hace falta un programa de estímulo a la demanda que, con una gestión centralizada de ayudas directas exentas de tributación y cumpliendo con el principio de neutralidad tecnológica, garantice el acceso de todas las rentas a una movilidad eficiente”.