Lo sucedido ayer 28 de diciembre en Madrid es el claro ejemplo de lo que en Hispanidad llamamos el signo de nuestro tiempo: la Blasfemia contra el Espíritu Santo, en este caso, el "derecho al aborto". 

Empecemos por el principio, el Día de los Santos Inocentes se celebra el 28 de diciembre y es la conmemoración la matanza de los niños menores de dos años nacidos en Belén, ordenada por el rey Herodes I el Grande con el fin de deshacerse del recién nacido Jesús de Nazaret.

Ahora todo se llena de bromas, noticas falsas con cierta gracia y vídeos donde cuentas una 'mentirijilla', pero la realidad es que este día está para rezar y recordar la gran matanza de inocentes, que ahora mismo se llama aborto, quirúrgico y químico.

Para tal efecto, son muchas las personas que se reúnen para rezar a las puertas de abortorios, y un año más así sucedió en el Refugio Provida de la calle del Pensamiento número 23, que se encuentra frente a la Dator, la clínica que más abortos realiza a lo largo del año en toda España.

Para sorpresa de los que acudieron esa mañana a rezar, el Refugio Provida, que lo único que trata es de salvar vidas y dar más opciones a las mujeres que quieren continuar con su embarazo, estaba completamente vandalizado. Además había un gran número de vehículos de la Policía Nacional y una contramanifestación de abortistas.

Recuerden que la blasfemia contra el Espíritu no es otra cosa que cambiar el bien por el mal. Por ejemplo, calificar el aborto como un derecho: ¿Derecho de una mujer a matar a su propio hijo en sus propias entrañas? ¿En serio? Increíble pero cierto... y comúnmente admitido. Hasta tal punto que la manifestación es proaborto, contra los del Refugio que da vida y encima los que reciben la violencia son los pérfidos provida, y no al revés. Aunque se intente vender lo contrario.

Hazte Oír, impulsora del Refugio Provida, ha anunciado que "interpondrá una denuncia inmediata por este nuevo ataque", además, han avisado de que están estudiando "activar otras medidas judiciales" contra el Delegado de Gobierno al "haberse supuestamente autorizado una contramanifestación en misma fecha y enclave" que la concentración provida.