Renfe no coge alta velocidad y tardará años en recuperar el beneficio de 2019 (86 millones de euros) y en superarlo, como se puede ver en las cifras que se han conocido en dos días de esta semana. El pasado lunes, Renfe publicaba unas pérdidas de 277,8 millones hasta septiembre, un 16% inferiores a las de hace un año, pero mayores a las semestrales (-241,8 millones); y el miércoles en el Congreso, se hablaba de sus previsiones para 2022, entre ellas un beneficio de 7,9 millones, frente al resultado negativo de 348 millones en el que estima cerrar este año.

El operador ferroviario que preside Isaías Táboas ha reducido sus pérdidas hasta septiembre en 55 millones, respecto a las que tenía hace un año, pero sigue muy lejos de ganar 69,2 millones, como le sucedió en el mismo periodo de 2019. Una cierta mejora que se explica por el aumento de viajeros del 14,5%, hasta 226 millones de personas, y también de las mercancías transportadas en un 11,7%, a 11,67 millones de toneladas. Precisamente, de cara a 2022, prevé un incremento de 118 millones de pasajeros, pasando de los 345 millones que calcula para el conjunto de este año a los 463 millones, y las mercancías transportadas crecerán de 16 millones a 17,5 millones.

Renfe ha transportado 226 millones de personas hasta septiembre y espera alcanzar las 463 millones el año que viene, pero ahora tiene competencia francesa y la italiana llegará en el segundo semestre de 2022

Eso sí, Renfe ha preferido destacar que ha logrado un Ebitda de 19,8 millones hasta septiembre, siendo el primer beneficio operativo desde que empezó el Covid-19. Sin embargo, está muy lejos del que presentaba en el mismo periodo de 2019, cuando la cifra era de 366,4 millones, y quizá la previsión de 2022 (438 millones) resulta demasiado optimista.

Por su parte, los ingresos de Renfe han ascendido a 2.288,7 millones en los nueve primeros meses, un 7,1% mayores a los de hace un año, pero menores a los de hace dos (3.014,2 millones). Eso sí, Táboas expuso a los diputados que elevarán la cifra a 4.370 millones en 2022. Veremos, porque todo depende de la cantidad de viajeros y de mercancías, así como de la evolución del Covid y de que no vuelvan las restricciones de movilidad, y de la internacionalización

Y ojo, no hay que olvidar que Renfe ahora tiene competencia con la liberalización ferroviaria de la alta velocidad. Ouigo, el AVE low cost del operador francés SNCFse inauguró el 8 de mayo, mucho antes que el de Renfe (el AVLO), el cual arrancó el pasado 23 de junio, y en el segundo semestre de 2022, llegarán los trenes de Ilsa (empresa italo-española formada por Trenitalia y Air Nostrum).